Son parecidas, pero un color marca la diferencia en el significado de dos señales de tránsito: ¿cuáles son y para qué se usan?
Conocerlas es fundamental para circular de forma segura por las rutas del país.
Un golpe de vista confunde dos señales de tránsito que se diferencian por el orden de las primeras flechas en cada una y por el color de la segunda, pero ambas están circuladas en rojo.
La que tiene dos flechas opuestas de color negro indica el comienzo de doble mano y advierte a los conductores que en esa vía pueden circular vehículos en ambas direcciones. Es la R26.
La de dos flechas, una de color negro y otra roja, determina la preferencia de avance.
Está clasificada como una de las reglamentarias de prioridad y significa que si una persona se topa con ella tiene la obligación de ceder el paso al vehículo que se aproxima de frente, o en caso de que ya haya ingresado a una zona donde solo puede pasar un automóvil, tendrá que retroceder.
Si bien señalizan distintas contingencias de tránsito, su similitud visual no condice con lo que representan.
Qué indican las señales
Son señales de tránsito reglamentarias o prescriptivas aquellas que marcan los límites y las prohibiciones con órdenes específicas.
No respetarlas es sancionable con multa.
Se dividen entre las de prohibición, de restricción y de prioridad.
Advertencias
Las preventivas son las que advierten a los conductores con lo que están por encontrarse.
Por ejemplo, una curva pronunciada, un puente angosto o una escuela. Se dividen entre las físicas y de máximo peligro.
Las señales informativas son las que comunican al conductor sobre servicios, destinos y distancias.
En general se ubican en sitios alejados de las urbes, donde no hay buena señal para obtener la información por mano propia.
Se utilizan mucho en lugares turísticos.
Las señales transitorias son las que le avisan a los conductores sobre procedimientos poco habituales en el camino.
Un ejemplo muy habitual: “Obra en construcción” u “hombres trabajando”.