Los ucranianos en Crimea son reclutados por el ejército ruso y obligados a luchar contra su patria so pena de encarcelamiento y penas de prisión, denunció este jueves la primera viceministra de Asuntos Exteriores del gobierno de Volodímir Zelenski, Emine Dzhaparova.

La funcionaria ucraniana también expresó que los líderes tártaros de Crimea y los activistas ucranianos son arrestados y detenidos bajo cargos de espionaje o sabotaje. Ella formuló esos comentarios en su discurso durante la 34ª sesión especial del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en Ginebra.

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“La situación en Crimea se ve ensombrecida por una nueva ola de agresión militar rusa activa en Ucrania. Los ucranianos en Crimea son reclutados por el ejército ruso y obligados a luchar contra su patria. La negativa amenaza con encarcelamiento y penas de prisión. Se les priva del derecho a poseer tierras en Crimea, a estudiar en su lengua materna. Las autoridades de ocupación cierran o embargan las instituciones religiosas”, dijo Dzhaparova.

Según ella, los líderes del pueblo tártaro de Crimea y los activistas ucranianos son detenidos y encarcelados hasta dos décadas por cargos de espionaje, sabotaje y terrorismo.

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El Ministerio de Relaciones Exteriores ruso indicó que Rusia eligió no participar en esta sesión especial porque considera sesgado a ese evento, informó la agencia Xinhua.

"Por desgracia, nuestros argumentos y explicaciones en relación con los verdaderos objetivos de la operación militar especial y la situación en el terreno están siendo completamente ignorados", dijo la portavoz Maria Zakharova, citada en una declaración de la cancillería.

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La vocera añadió: "La delegación rusa no legitimará con su presencia otro espectáculo político sesgado". Zakharova también dijo que Occidente ha utilizado tradicionalmente los derechos humanos para perseguir sus propios intereses mediante un comportamiento oportunista.

"El Consejo de Derechos Humanos parece despreocupado por el hecho de que su reputación pueda ser desacreditada. Se ha convertido en un 'club cerrado de democracias genuinas que impone reglas al resto del mundo y castiga a quienes las violan'", dijo la portavoz.