El príncipe Harry llegó a un acuerdo sobre el resto de su demanda contra el Mirror Group Newspapers por pirateo telefónico y otros actos ilícitos, después de que el grupo editor aceptara pagar una indemnización sustancial por daños y perjuicios y sus costas legales, informó el viernes su abogado al Tribunal Superior de Londres.

En diciembre, el Tribunal Superior dictaminó que Harry, de 39 años, había sido víctima de recopilación ilegal de información, incluido el pirateo telefónico, por parte de periodistas de los diarios Daily Mirror, Sunday Mirror y Sunday People con el conocimiento de sus editores.

Sin embargo, la sentencia sólo tuvo en cuenta 33 de los 148 artículos que Harry había denunciado, fallando a su favor en 15 de ellos. Su abogado, David Sherborne, dijo ante el tribunal que MGN había admitido el resto de la demanda y aceptado pagar otra suma considerable, así como las costas judiciales del Duque de Sussex.

El hijo menor del rey Carlos III y nieto de Isabel II continuará su misión de buscar introducir cambios en la prensa británica después de llegar a un acuerdo con Mirror Group Newspapers sobre su demanda pendiente.

"Todo lo que dijimos que estaba ocurriendo en Mirror Group, sí estaba ocurriendo, y de hecho era mucho peor, como resolvió el Tribunal en su extremadamente condenatoria sentencia", dijo Harry en una declaración leída por su abogado David Sherborne.

También lanzó otro ataque contra Piers Morgan, exdirector del Daily Mirror.

"A la luz de todo esto, pedimos de nuevo a las autoridades que defiendan el Estado de Derecho y demuestren que nadie está por encima de él. Eso incluye al señor Morgan, que como editor, sabía perfectamente lo que estaba pasando, tal y como sostuvo el juez", señaló su declaración.

"Su desprecio por la sentencia del tribunal y sus continuos ataques desde entonces demuestran por qué era tan importante obtener una sentencia clara y detallada".

Desde que dejó sus funciones con la corona en marzo de 2020, y se mudó a California con su esposa estadounidense Meghan, el miembro de la realeza británica se ha propuesto librar a la prensa del país de los altos ejecutivos y editores a los que acusa de abusar de su poder para difundir mentiras e inmiscuirse ilegalmente en la vida de las personas.

"Como ya dije en diciembre, nuestra misión continúa. Creo en el cambio positivo que supondrá para todos nosotros. Es la razón por la que empecé esto, y por la que seguiré hasta el final".

(Con información de la agencia Reuters)