Debido al registro de un fuerte brote de casos de coronavirus, las autoridades de Austria decidieron volver a un confinamiento estricto a partir de este lunes hasta el 13 de diciembre. Se trata de una medida dura que generó rechazo de sectores conservadores que protagonizaron grandes protestas durante el fin de semana. 

El aumento de casos fue tal que el país dictaminó la obligatoriedad de la vacuna a partir del 1° de febrero. La desolación típica de la cuarentena estricta se apoderó nuevamente de las calles, los comercios, bares y salas de cine de Austria. A excepción de las escuelas, el país se sumergió en el silencio al que acostumbraba al inicio de la pandemia en 2019. 

Entre las actividades exceptuadas figuran realizar las compras, practicar deportes, ir a la oficial, llevar a los niños a la escuela, y recibir atención médica. Más allá de esta breve lista, las autoridades bregan porque cada ciudadano permanezca en sus hogares y evite salir al exterior para cortar la cadena de transmisión del virus que registra un alza en toda Europa.

Lee también: Austria es el primer país en obligar a toda su población a vacunarse contra el Covid-19

La realidad es que se trata de una medida sorpresiva en Austria, dado que semanas atrás el excanciller conservador Sebastian Kurz dictó el fin de la pandemia producto a la efectividad de las vacunas. Por otro lado, con tan solo el 66% de vacunados, el Gobierno dictó la obligatoriedad de la vacunación que comenzará a regir a partir del 1 de febrero del 2022, y prohibió la visita de sitios públicos a las personas que no cuenten con al menos una dosis de las vacunas autorizadas. 

Ante las medidas adoptadas, sectores conservadores se volcaron a las calles a protestar contra las nuevas restricciones. Holanda acumulan su tercera noche seguida de acciones callejeras, registrando detenciones por parte de la policía por actos de vandalismo.En Bélgica también registraron manifestaciones de miles de personas que se oponen a la vacunación obligatoria, y Australia fue epicentro de duras protestas tras la vuelta al confinamiento.