¿Cómo se da la lucha sindical en Corea del Sur?
En medio de cánticos y K-pop, los trabajadores reclaman salarios justos en el marco de una organización en crecimiento.
En un contexto de actuaciones de K-pop y música dance, más de 2.000 trabajadores sindicalizados de Samsung Electronics se reunieron en Seúl, realizando una inusual manifestación para exigir que el gigante tecnológico surcoreano pague salarios justos.
En los últimos dos años, el Sindicato Nacional de Electrónica Samsung (NSEU) vio su número de miembros cuadruplicarse hasta alcanzar unos 28.000, o más de una quinta parte de la fuerza laboral total de la compañía, informaron funcionarios vinculados con los gremios.
Desafío a las tácticas antisindicales
El rápido crecimiento de la membresía del sindicato se produce después de que el conglomerado más poderoso del país se comprometiera en 2020 a poner fin a sus prácticas de desalentar el crecimiento del trabajo organizado.
Jay Y. Lee , presidente de Samsung Electronics, se había disculpado públicamente en ese momento por los escándalos sobre tácticas antisindicales y había declarado el fin de la filosofía "no sindicalizada".
Los datos del gobierno muestran que los niveles de afiliación a los sindicatos de empleados no aumentaron en Corea del Sur durante las últimas dos décadas y siguen siendo relativamente bajos en comparación con otros países de la OCDE.
Pero cada vez más trabajadores jóvenes se están convenciendo de los beneficios de la sindicalización, declararon los dirigentes, citados por la agencia de noticias Reuters.
“¡Respeto al trabajo!”
Gritando "respeto al trabajo", los ingenieros y oficinistas sindicalizados también se entretuvieron con música electrónica de baile interpretada por un conocido comediante convertido en DJ, que se viste como un monje budista.
También actuaron cantantes de K-pop, lo que provocó que los trabajadores sindicalizados de entre 20 y 30 años aplaudieran y bailaran.
La manifestación cerca de la oficina de Samsung en el ostentoso distrito de Gangnam de Seúl por momentos se asemejaba a una fiesta callejera.
"Nuestras manifestaciones no son violentas, pero aún podemos mostrar nuestra fuerza", declaró Choi Young-wook, un ingeniero de chips de Samsung de 27 años, que llevaba una gorra negra con el logo del sindicato.
La empresa dispuso aumentos de salarios este año en un 5,1% y, aunque el sindicato no necesariamente se opone a tal aumento, quiere un día más de vacaciones anuales, así como bonificaciones transparentes basadas en el desempeño.
Las negociaciones entre la empresa y el sindicato se reanudaron el 21 de mayo.
En una declaración a Reuters, Samsung Electronics informó que las negociaciones a nivel de trabajo se habían reanudado y que las negociaciones principales estaban programadas para el 28 de mayo. "Entablaremos sinceramente conversaciones con el sindicato", señala un comunicado.
Los dirigentes gremiales aseguran que entre los empleados más jóvenes existe una percepción cada vez mayor de que los sindicatos pueden ayudar a crear un lugar de trabajo más justo, mientras que la generación mayor de la empresa sentía que los sindicatos podrían alterar la productividad laboral.
En general, la tasa de afiliación sindical de Corea del Sur rondó el nivel del 10% desde 2004, según datos del Ministerio de Trabajo.
"Cada vez más personas dentro de la empresa se están dando cuenta de por qué necesitan los sindicatos, que es para tener voz, y estas personas nos fortalecen día a día", declaró Son Woo-mok, presidente de NSEU, quien comenzó a trabajar en Samsung en 2005.