Juan Román Riquelme para muchos “cuidó el mango” en Boca contratando jugadores libres, que solo algunos le dieron resultados, pero a la postre esa decisión terminó siendo muy mala para la economía de la institución.

Es que la mayoría de los jugadores que llegaron a Boca valen menos de lo que pagaron, salvo un par de excepciones de los que llegaron “libres”.

Hay jugadores que se saben que no tiene valor de reventa, como el uruguayo Cavani, cuya categoría es indiscutible pero hasta ahora en Boca no pudo justificar los más de 6 millones de dólares que cuestan su pase y contrato.

Los jugadores de Riquelme: perdió plata

Roncaglia, Valdez, Zambrano, Pulpo gonzalez, Briasco, Orsini, Rolón, Javi García, Pol Fernández, Ramírez, Romero, Cavani, Fabra, Rojo, Advíncula, Payero, Figal, Benedetto, Oscar Romero, son algunos de los jugadores que llegaron a Boca y que salvo excepciones las inversiones, aunque sea de sueldos y primas no se recuperará.

En estos jugadores, entre contratos y compra de pases, Boca gastó alrededor de 30 millones de dólares.

Por ahora podría recuperar los 3 millones de dólares que invirtieron en la vuelta de Benedetto. Advíncula llegó libre y podría ser transferido si llegan ofertas.

Hay otros casos que la ganancia pasa por lo deportivo: Chiquito Romero ya no tiene valor de reventa pero pagó cada centavo gastando en él porque sin su presencia Boca no hubiera sido finalista de la Copa Libertadores.

Figal, con altas y bajas, podría recuperarse y el resto vale menos de lo que se gastó, con cotizaciones que bajaron por lo individual y lo colectivo, porque desde que Riquelme está en Boca sus equipos no tuvieron ninguna identidad, mutaron de acuerdo a las circunstancias.