Activistas por el cambio climático en Italia arrojaron pintura este miércoles a la entrada del famoso teatro de ópera La Scala de Milán antes de la presentación inaugural de la temporada, informó la policía local.

Los activistas organizaron protestas de alto perfil en toda Europa en los últimos meses, a veces dirigidas a museos y obras de arte para pedir medidas más duras para abordar el calentamiento global.

El movimiento Ultima Generazione (Última Generación) emitió un comunicado adjudicándose la responsabilidad del episodio de Milán.

"En lugar de tomar las medidas necesarias para salvaguardar el futuro de Italia de la sequía y los desastres climáticos, la política se encierra para disfrutar de un espectáculo para unos pocos”, escribió el grupo.

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Fenómenos medioambientales recientes

Doce personas murieron en la isla vacacional de Ischia, en el sur de Italia, el mes pasado después de que un deslizamiento de tierra causado por lluvias torrenciales devastara una pequeña ciudad.

Durante el verano, la peor sequía en 70 años golpeó las áreas del norte alrededor del río Po, que representa aproximadamente un tercio de la producción agrícola del país.

Durante el último mes, Ultima Generazione arrojó sopa sobre una obra de Van Gogh en Roma, arrojó un líquido negro sobre una pintura de Gustav Klimt en Viena y harina sobre un auto deportivo pintado por el artista pop estadounidense Andy Warhol que estaba en exhibición en Milán.

La Policía informó que había detenido a cinco personas tras el incidente en La Scala, mientras que los limpiadores quitaron rápidamente la pintura de la entrada del teatro.

La Scala abría este miércoles su temporada 2022-23, uno de los puntos destacados del calendario cultural italiano, con la representación de la ópera rusa "Boris Godunov".

Estaba previsto que asistieran la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.