Un hombre venezolano fue condenado a 13 años y cuatro meses de prisión tras admitir que participó del secuestro de Javier Moscuzza, un empresario de Quilmes que le dio trabajo.

Ramón Ángel Carrillo Rodríguez llegó a la Argentina proveniente de Venezuela. A los pocos días, se radicó en una pensión de Quilmes, cerca de un supermercado, en el que fue contratado como repositor. Luego renunció, quiso ser vigilador y después se interesó por el negocio de las criptomonedas.

Durante la cuarentena por la pandemia de coronavirus, en octubre de 2020, participó del secuestro del supermercadista que le dio empleo. Fue el ideólogo del plan y antes de ser capturado escapó a su país de origen, donde fue detenido.

Javier Moscuzza, dueño del comercio, fue secuestrado el 13 de octubre de 2020 y permaneció en cautiverio durante cinco días. El calvario terminó cuando su hermano pagó el rescate con bitcoins (con un total de cuatro transferencias), por un valor de 65 mil dólares.

Este caso es uno de los más inéditos de la historia criminal argentina. No solamente porque el cobro fue en criptomonedas, sino que las llamadas se hicieron desde Colombia vía WhatsApp.

Ahora, Moscuzza y su familia viven en el exterior. El supermercadista prestará testimonio por Zoom en el debate. 

Carrillo Rodríguez recibió una pena de 13 años y cuatro meses de cárcel acusado de los delitos de de secuestro y “porte ilícito de arma de fuego”.

El delincuente vivió en una pensión situada cerca del comercio de Quilmes. Trabajó allí desde el el 6 de septiembre de 2017 hasta el 31 de julio de 2018.

Dejó de trabajar para Moscuzza porque quería conseguir empleo como vigilador privado. Carrillo Rodríguez hizo los trámites en la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMaC, el ex Renar) para ser legítimo usuario de armas de fuego. Consiguió los permisos

Al no obtener el empleo, volvió a pedirle empleo a Moscuzza, pero el empresario le dijo que ya había contratado a otro repositor, aunque lo recomendó a su hermano, dueño de una empresa constructora, donde estuvo tres o cuatro meses.

El oriundo de Venezuela dejó de trabajar para el hermano de Moscuzza porque dijo que se iba a dedicar al negocio de las criptomonedas. En ese momento estaba de novio con la encargada del supermercado, que también renunció con el mismo objetivo. La pareja tuvo un hijo.

¿Quiénes son los otros sospechosos?

El martes 27 el Tribunal Oral Federal (TOF) N° 2 de La Plata comenzará a juzgar a los otros cuatro presuntos involucrados del secuestro extorsivo: Jean Carlos Rivero Márquez y Junior Argenis Páez Peña, de nacionalidad venezolana, Jesús Teodosio Ramos Paz, un sindicado narco nacido en Perú, y Matías Avellaneda. El Ministerio Público estará representado por el fiscal Rodolfo Molina.

El juicio tendrá 12 audiencias entre el 27 de este mes y el 9 de abril próximos.