En la Patagonia hay una laguna de color azul intenso que está enmarcada en un paisaje natural de antología y en la que se puede avistar Huemules, unos mamíferos que están en peligro de extinción y a los que se conoce también como “ciervos del sur andino”. 

Se trata de la Laguna Capri, que está ubicada rodeada de un bosque nativo con vistas al macizo Fitz Roy en la pequeña localidad turística de El Chaltén, uno de los destinos más solicitados por los amantes del treeking en la Argentina. 

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De hecho, para llegar hasta este impactante espejo de agua en el que reina la tranquilidad se debe realizar una caminata de de dificultad baja de 8 kilómetros, que tiene un tiempo de duración de entre tres y cuatro horas. Este camino es escénico y está perfectamente demarcado, por lo que es muy fácil recorrerlo. 

Una de las perlitas cuando se atraviesa el sendero que lleva hasta la Laguna Capri es el Mirador del Río Las Vueltas, que está en la primera parte de este treeking y es una de las vistas irónicas que tiene la localidad de El Chaltén.  

La Laguna Capri es un pequeño espejo de agua de origen glaciar que cuenta con una pequeña playa de arena y como está ubicada en un lugar muy agreste en el que reina la naturaleza se puede apreciar fauna autóctona entre la que se destacan los Huemules. 

Los Huemules son animales muy simpáticos y les gusta bañarse en el agua de la laguna, por lo que es muy común verlos en este lugar. Como se mencionó anteriormente se encuentran en peligro de extinción por lo que es deber de todos cuidarlos para que se logre conservar su especie. 

Cómo llegar hasta El Chaltén 

La manera tradicional que utilizan los turistas para llegar es tomar un vuelo hasta El Calafate y de ahí alquilar un auto o sacar un pasaje en colectivo para llegar hasta El Chaltén. La distancia es de 215 kilómetros que se recorren en poco más de tres horas y media.