Diputados aprobó el proyecto de profesionalización de acompañantes terapéuticos
La iniciativa de Soledad Carrizo (Evolución Radical) contó con el apoyo de todos los bloques a excepción de La Libertad Avanza. Busca que quienes desempeñen estas tareas sean considerados profesionales y no meros auxiliares.
La Cámara de Diputados aprobó hoy el proyecto de ley que regula el ejercicio de los acompañantes terapéuticos y que busca que sean considerados trabajadores profesionales autónomos, y no como simples auxiliares.
El proyecto impulsado desde el 2016 por la diputada nacional Soledad Carrizo (Evolución Radical) cosechó 197 votos afirmativos y tres negativos de los liberales Javier Milei, Victoria Villarruel y Carolina Píparo.
La ley apunta a generar un marco general y nacional con criterios comunes para regular la actividad profesional de acompañantes terapéuticos, dado que hay 13 provincias que ya han sancionado normativas propias sobre la materia, aunque muy dispares entre sí.
"Los servicios del acompañante terapéutico tienen una creciente demanda, acompañada por un continuo aumento de nuevos profesionales, y nuevas ofertas académicas de formación. Pero esto es también un desafío que reclama reglas claras para su desarrollo. Y esa ha sido nuestra meta", sostuvo Carrizo.
Los acompañantes terapéuticos son aquellos profesionales que con matrícula habilitante intervienen a través de un abordaje biopsicosocial integral, en el marco de un equipo interdisciplinario y por indicación de un profesional de la salud tratante a cargo para facilitar la rehabilitación de la persona acompañada.
También intervienen a través de estrategias terapéuticas no farmacológicas para prevenir eventuales recaídas, identificar situaciones de riesgo y promover su reinserción en el ámbito comunitario, promoviendo el ejercicio efectivo de sus derechos, bajo el paradigma de salud comunitaria y colectiva.
El proyecto establece que "para el ejercicio profesional los acompañantes terapéuticos deberán inscribir previamente el título habilitante ante las autoridades competentes designadas por las jurisdicciones locales".
También deberán aprobar un curso de formación complementario en un plazo máximo de 5 años contados a partir de la promulgación de la ley.
Además, se prevé la obligación del Poder Ejecutivo Nacional de promover ante los organismos que correspondan la creación de la carrera de acompañante terapéutico a cargo de Universidades e Institutos de educación superior, de gestión pública y privada, y la unificación de la currícula.
El diputado del Frente de Todos y médico de profesión Daniel Gollan resaltó que el proyecto que "viene a dar cuenta de una necesidad que ha sido fuertemente sostenida y militada por distintos referentes a lo largo y ancho del país".
"Es un tema que tiene que ver con esas nuevas necesidades que van surgiendo y tiene una historia porque hace no mucho tiempo la salud era casi patrimonio de los médicos, y todo el resto eran como asistentes y, obviamente, este criterio ha ido para bien deviniendo en un proceso en el cual ahora hay muchos más actores que se suman y que se organiza la respuesta como equipos de salud con una visión interdisciplinaria o multidisciplinaria", explicó el ex ministro de Salud nacional y bonaerense.
En ese sentido, subrayó que "el tema de la salud pública ya no es patrimonio de una sola incumbencia o de una sola profesión sino de un conjunto".
Gollan indicó que los acompañantes terapéuticos "vienen a cumplir un rol muy importante porque son el sostén, el acompañamiento de todas aquellas personas que por problemas de salud o discapacidad necesitan un soporte, una ayuda continua y permanente".