Confirmaron la prisión preventiva contra el último Policía de la Ciudad detenido por el crimen de Lucas González, el joven de 17 años asesinado en noviembre 2021 cuando salía de una práctica del club Barracas.

Se trata de Facundo Torres, quién fue señalado por el efectivo Héctor Cuevas durante el juicio al sostener que ayudó a plantar el arma en el auto en el que iban la víctima y sus amigos.

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Esta medida surgió el mismo día de los alegatos de los abogados Fernando Soto y Martín Sarubbi en representación de Gabriel Alejandro Isassi (42), del oficial mayor Fabián Andrés López (48) y del oficial Juan José Nieva (38) acusados del homicidio de Lucas. 

Fue la sala 4 de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional quién confirmó la prisión preventiva contra el agente de la Ciudad al explicar que existen riesgos “de presión a querellantes y testigos”.

Esta instancia fue considerada y aprobada luego de que su defensa haya solicitado la apelación al planteo de prisión preventiva.

A principios de junio, en el medio del juicio oral, Héctor Cuevas, detenido por el encubrimiento del crimen del joven de 17 años, pidió la palabra y detalló frente a los jueces del Tribunal Oral Criminal 25 cómo y quienes plantaron el arma que apareció en el baúl del auto donde iba la víctima y sus amigos Joaquín Zúñiga (19), Julián Salas (19) y Niven Huanca (19).

En su declaración el hombre de 51 años dio tres nombres, de los cuales dos están detenidos. Se tratan de Gabriel Isassi y el subcomisario Roberto Inca.

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Allí indicó que el primero plantó el arma y que el segundo fue quién dio la orden. Con respecto a Torres, Cuevas sostuvo que fue quien llevó en su moto de la Policía a Isassi a buscar la réplica de la pistola a la comisaría 4D.

Este martes, la defensa de Isassi, López y Nieva solicitó la absolución de los tres policías de la Ciudad, acusados de haber disparado contra el vehículo en el que viajaba Lucas.