"La Bruja Cleo": la primera asesina serial de Honduras tras matar a tres hombres
Alma Cleotilde Grand Pérez fue abandonada por su madre y sus hermanos y fue violada por su padre, quien también la vendió cuatro veces. Esto la llevó a crecer con gran odio hacia el sexo masculino.
Alma Cleotilde Grand Pérez, conocida como "La Bruja Cleo", fue la primera asesina serial de Honduras, donde robó y mató de manera despiadada a tres hombres.
Desde chica, Grand Pérez supo lo que era el dolor y el rechazo familiar y creció siendo mala. Su mamá la abandonó junto a sus hermanos y su padre además de abusarla sexualmente la vendió cuatro veces, pero ella siempre volvió a su casa.
Esto generó un odio y rechazo a los hombres, lo que puede explicar que la mayoría de sus víctimas eran personas que en cierta forma representaban el recuerdo de su figura paterna.
Esta mujer tuvo hijos con varios hombres, pero una de sus parejas le transmitió el VIH, lo que provocó un gran enojo que derivó en el crimen del mismo.
"La Bruja Cleo" fue detenida en 1998 y la sentenciaron a 70 años de cárcel, pero solo cumplió 23 en la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS), ya que falleció el 10 de noviembre de 2021.
Esta mujer, originaria de French Harbor, en Roatán, viajó hasta Belice para intentar reencontrarse con su madre y dejar los abusos a los que era sometida por su padre.
Sin embargo, en ese país conoció la brujería durante una orgía de sexo, drogas y sangre, ritos que practicó hasta que fue detenida por la Policía.
Decenas de personas llegaban a su "consultorio" para pedirle ayuda. De hecho, la múltiple homicida se hacía llamar "La doncella de Satanás" e incluso decía que el diablo quería que ella siguiera matando, pese a estar ya apresada.
Su forma de matar era despiadada: asaltaba a sus víctimas, las descuartizaba, practicaba ritos satánicos con sus restos y los enterraba por mucho tiempo en su vivienda.
De hecho, se sospechó que la carne asada que vendía podría haber sido de sus víctimas y que sus deliciosos nacatamales (una masa rellena con carne, verdura y arroz) tenían carne humana.
La desaparición de un hombre guatemalteco permitió a la Policía poder detenerla. Los uniformados determinaron que esta víctima nunca había abandonado el municipio de El Porvenir, por lo que ahí comenzó la búsqueda.
Los agentes se hicieron pasar por clientes en busca de trabajos de hechicería y se pudo determinar que el guatemalteco había estado en esa vivienda porque su mercadería estaba en el lugar.
En el fogón de la casa de "La Bruja Cleo" hallaron el cadáver del extranjero, pero también encontraron el cuerpo de otro hombre oculto entre unas matas de plátano.
Grand Pérez murió a los 63 años tras pasar recluida 23 años en una celda solitaria, sin la visita de ningún pariente.
El 5 de noviembre de 2021 tuvo que ser internada en el Hospital Escuela de Tegucigalpa, a raíz de las numerosas enfermedades que padecía, y cinco días después murió.