A horas de la sesión preparatoria, la vicepresidenta y titular del Senado, Victoria Villarruel, se reunió con jefes de bloques opositores, con la excepción de Unión por la Patria. 

La intención de la máxima autoridad del Senado es evitar un revés en el recinto el viernes que viene, cuando se deberán elegir las autoridades de la Cámara baja.

También sirvió para amortiguar las críticas crecientes de la oposición por los sistemáticos ataques del presidente Javier Milei, quien recientemente llamó “nido de ratas” al Congreso.

El tratamiento del DNU 70 de desregulación económica que el Gobierno dictó en diciembre pasado también fue materia de conversación, y no se pasó por alto el pedido reiterado de Unión por la Patria para llevar al recinto la votación por la validez o invalidez de la norma, toda vez que están vencidos todos los plazos para la conformación de la comisión bicameral.

No obstante, la discusión comenzará mañana a las 12 en el Salón de las Provincias del Senado, donde primero se constituirá la comisión bicameral permanente de Trámite Legislativo, y luego comenzará el debate con argumentaciones de uno y otro lado.

El oficialismo no quiere sorpresas y por eso es importante que Villarruel tienda puentes de diálogo con los senadores de la oposición blanda, como la UCR, Cambio Federal y Unidad Federal.

El riesgo está latente, ya que Unión por la Patria tiene 33 senadores y está a tiro del quórum y la mayoría simple: con solo cuatro votos más le alcanzará para rechazar la validez del decreto en el recinto de la Cámara alta.