El gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, consiguió ser el único político que logró estrecharle la mano al astro y capitán de la Selección argentina que ganó el Mundial de Qatar, Lionel Messi, al recibirlo en el aeropuerto de Rosario, junto a Ángel Di María, luego de que ambos jugadores participaran de la caravana en Buenos Aires.

Messi y Di María llegaron en un avión privado al Aeropuerto Internacional de Rosario para pasar unos días de descanso junto a sus familias, acompañados por el cordobés Paulo Dybala que aprovechó el viaje.

En Rosario, el gobernador Perotti recibió a los jugadores acompañado del presidente de la terminal aérea, Eduardo Romagnoli, y así pudo conseguir una foto que no logró el presidente Alberto Fernández. En las imágenes que circularon se observa al gobernador peronista saludando a Messi y Di María e intercambiando algunas palabras con ellos.

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El domingo, los festejos en Rosario por la conquista futbolística desbordaron el Parque Nacional a la Bandera y la fiesta se extendió en otros epicentros como el barrio Pichincha y Avenida Pellegrini.

En tanto, hubo críticas al gobernador, ya que el diputado del PJ, Luis Rubeo, escribió en Twitter: "Que ironía, Perotti recibió a la selección mientras no adhería a un feriado que permitía que los y las trabajadoras pudieran ir a recibir a nuestros campeones".