El presidente Alberto Fernández celebró los dos años de la sanción de la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo y cargó contra el exmandatario Mauricio Macri al que responsabilizó de haber atentado contra el proyecto durante su gestión. "En 2018 había un presidente que se había ocupado de que no saliera", expresó Fernández en el Salón de las Mujeres.

En la misma línea, amplió: "Para 2020 había un Presidente que llamaba a los gobernadores para decirle que voten, y en 2018 había otro que les decía 'te pago para que no votes'".

El Presidente apareció hacia el final del acto coordinado por las ministras Carla Vizzotti (Salud) y Ayelén Mazzina (Mujeres, Géneros y Diversidad) y la secretaria de Legal y Técnica, Vilma Ibarra, impulsora del proyecto.

"Tampoco lo cuento como un merito, fue mi convicción, y dos años después estoy muy satisfecho porque los daños en la salud o las muertes se han reducido", indicó utilizando una corbata verde, frente a un auditorio repleto de mujeres con pañuelos que lo aplaudían.

Fernández hizo referencia a la sesión del Senado de agosto de 2008 que la Cámara Alta rechazó con 38 votos en contra y 31 a favor. El proyecto que había sido aprobado en Diputados, fue rechazado por los votos en contra de Cambiemos y de la minoría del kirchnerismo y aliados. 

Durante el acto en Rosada, el mandatario planteó: "Eso lo que indica es que había muchos daños en la salud de las mujeres por abortos mal practicados. Deja de ser una ley promotora de las mujeres, es una ley promotora de la vida y de la salud de las mujeres".

La tarea de los exfuncionarios Ginés González García y Elizabeth Gómez Alcorta fue destacados por todos los expositores, incluido el mandatario.  

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En otro pasaje del discurso, resaltó la responsabilidad de Vilma Ibarra a la hora de aclararle la diferencia entre las figuras de "legalización" y "despenalización" del aborto, y resaltó su trabajo en la conquista.

Por otra parte, afirmó: "Uno puede ponerse el sombrero de hipócrita y decir de esto no hablemos y hagamos de cuenta que esto no ocurre, porque ocurre. Nunca he sabido ponerme el sombrero de hipócrita porque detesto la hipocresía social".

Para Fernández, la ley fue un triunfo colectivo "contra la hipocresía" dado que además de "ampliar derechos", logró que "para muchas mujeres deje de ser un problema lo que antas era un problema". 

"El logro es colectivo, en todo caso fue el Gobierno el que se decidió a impulsarlo, trabajarlo, encontrar el momento y trabajar políticamente para que todos entiendan que había que hacerse cargo del problema que tenía que ver con un tema de salud pública y de derecho de la mujer", indicó. 

Por último, aseguró que la sanción fue el resultado de un cambio cultural y de la lucha del movimiento de mujeres que logró afianzar las ideas. "Siento que lo hicimos, y que además, fue de las mejores leyes que pudimos sacar. Hagamos todos lo necesario para que en la Argentina terminemos lo más rápido posible con las hipocresías", concluyó Fernández.