El obispo nicaragüense Rolando Álvarez fue excarcelado a última hora del lunes, según una fuente diplomática, lo que podría marcar un punto de inflexión en la prolongada represión del Gobierno contra la Iglesia católica.

La fuente diplomática dijo el martes que se estaban llevando a cabo negociaciones entre el Gobierno y los obispos católicos del país sobre el futuro de Álvarez, y que el prelado se encontraba en el complejo episcopal católico de la capital.

La fuente, que declinó ser identificada, añadió que las conversaciones incluían la posibilidad de que el obispo fuera expulsado del país centroamericano o enviado al exilio. El Gobierno no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre la liberación de Álvarez después del horario normal de trabajo del martes. Si el obispo se negara a abandonar el país, podría ser devuelto a prisión, dijo la fuente.

LEE: El Papa acusó al nicaragüense Daniel Ortega de liderar "una dictadura grosera"

A primera hora del día, el Confidencial informó que Álvarez había sido puesto en libertad el lunes por la noche, basándose en fuentes eclesiásticas y diplomáticas.

Álvarez, obispo de la zona rural de Matagalpa y destacado crítico del presidente Daniel Ortega, fue encarcelado el año pasado y condenado este año a 26 años de prisión acusado de traición tras negarse a ser expulsado a Estados Unidos.

Los lazos formales entre el Gobierno de Nicaragua y el Vaticano se rompieron este año después de que el papa Francisco calificara de dictadura el Gobierno de Ortega.

La raíz del conflicto se remonta a cinco años atrás, cuando el Gobierno apeló a los líderes eclesiásticos para que mediaran en las protestas antigubernamentales que se tornaron violentas con la muerte de más de 300 personas. REUTERS/Maynor Valenzuela