Corea del Norte disparó este lunes misiles balísticos de corto alcance al mar por primera vez en dos meses, mientras el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, visitaba Seúl para una conferencia organizada por el presidente Yoon Suk Yeol sobre el avance de la democracia. 

El ejército de Corea del Sur informó que varios misiles de corto alcance volaron unos 300 kilómetros (186 millas) después de ser disparados entre las 7:44 am y las 8:22 am (2244 a 2322 GMT del lunes) desde Pyongyang, la capital de Corea del Norte, y aterrizaron frente a la costa este.

Condenó los lanzamientos como una "clara provocación" y amplió que estaba compartiendo información sobre ellos con los Estados Unidos y Japón.

El Departamento de Estado de los Estados Unidos también condenó los lanzamientos, alegando que violaban varias resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y representaban una amenaza para la región.

El Ministerio de Defensa de Japón comunicó que se lanzaron tres misiles que viajaron unos 350 kilómetros, con una altitud máxima de 50 kilómetros.

El primer ministro japonés, Fumio Kishida, condenó los lanzamientos después de que la guardia costera de su
país también informara del disparo de lo que para él parecía ser un misil balístico y precisó que ya había finalizado su vuelo.

"La serie de acciones de Corea del Norte amenazan la paz y la seguridad de nuestra región y de la comunidad internacional, y son absolutamente inaceptables", declaró Kishida, calificando el lanzamiento como una violación de las resoluciones de la ONU.

Extracto y adaptación de un artículo de Jack Kim y Hyonhee Shin, para la agencia de noticias Reuters