Unas 47 personas, entre ellas un bebé de apenas 40 días, murieron tras producirse ataques israelíes contra la ciudad de Deir al Balah, el campamento de refugiados de Nuseirat y la urbe de Al Zawaida, en el centro de Gaza.

Según informaron fuentes médicas a las agencias internacionales, en Nuseirat fallecieron al menos 21 personas, entre ellas cinco niños y siete mujeres, a la vez que se indicó que las fuerzas aéreas israelíes atacaron varias viviendas.

En tanto, la agencia palestina Wafa, tras los bombardeos y después de que testigos se acercaron a ayudar a los afectados, el Ejército israelí atacó de nuevo, causando nuevas víctimas y las operaciones de búsqueda y rescate para localizar a desaparecidos bajo los escombros continúan.

Además, fuentes médicas señalaron que los cuerpos de los fallecidos fueron trasladados al Hospital de los Mártires de Al Aqsa, en Deir al Balah, donde al menos otros dos desplazados fallecieron en el bombardeo de una casa en el barrio de Al Hadba.