El año pasado, el intercambio comercial entre China y América latina superó los US$ 480.000 millones, con leve superávit de balanza para la región.

En lo que va del siglo, las transacciones se incrementaron 35 veces y China se convirtió en el principal socio comercial de Sudamérica y segundo del conjunto de América latina y el Caribe, por encima de la Unión Europea.

En 2023, Argentina le facturó 6.700 millones de dólares, principalmente por soja, carne bovina congelada y cebada.

Pero en los últimos 27 años, las exportaciones desde China se incrementaron a una tasa anualizada de 13,4%, desde US$553 millones en 1995 a $16,4 millones en el último registro.

Se erigió así en el segundo mayor socio comercial de Argentina y el primer origen de importaciones.

El volumen del comercio bilateral en los años más recientes alcanzó: en 2018 casi US$ 12.000 millones y en 2022 trepó a US$ 21.000 millones.

Teléfonos, vehículos pesados en construcción, compuestos heterocíclicos de nitrógeno, centrifugadoras y fertilizantes integran, en grandes líneas, las mercancías embarcadas hacia nuestro país.

Cálculos elaborados por BBC Mundo a partir de las cifras de la Administración de Aduanas de la República Popular China (AGA, por sus siglas en inglés) sitúan al país sexto en colocaciones de productos de América latina y Caribe al gigante asiático, con US$6.650.923.296. Y pegadito, con US$6.428.127.166, viene séptimo Colombia.

Los anteceden: Brasil con US$122.490.613.944; Chile con US$43.001.665.654; Perú US$25.515.610.682; México US$18.735.661.189; y Ecuador quinto, con US$7.795.315.626.

China le compra cada vez más a Latinoamérica, pero Argentina viene relegada

Mondino

Con este panorama a la vista, la canciller Diana Mondino llegará este domingo a China, acompañada por una nutrida delegación empresarial de diversos sectores, representativos de la oferta exportable argentina.

Si bien la continuidad o no del swap entre los bancos centrales de ambos países y el desembolso de 500 millones de dólares que destrabe las obras del complejo hidroeléctrico sobre el río Santa Cruz, son temas centrales de la agenda del viaje, la visita a las ciudades de Shanghái y Beijing para participar en foros y promocionar las oportunidades de inversión,permitirán tomar contacto con las causas que determinaron que el país esté tan relegado en el intercambio de mercancías con la región, pese al tamaño de su economía que supera a los restantes vecinos, salvo Brasil y México.

El gigante asiático importa principalmente de América Latina básicamente seis productos: soja, minerales de cobre y de hierro, petróleo, cátodos de cobre y carne bovina, que suman 72% del total.

Las importaciones de la región desde China, por otra parte, consisten fundamentalmente en productos manufacturados.

Brasil

Por lejos, Brasil es el principal socio comercial de China en América Latina. En 2023, el intercambio bilateral sumó US$181.000 millones, de los cuales US$122.000 millones correspondieron a exportaciones del país sudamericano que así obtuvo un superávit comercial de US$63.000 millones.

La consultora internacional Dezan Shira & Associates destacó en su última publicación China Briefing que Brasil es “uno de los pocos países del mundo que tiene un superávit comercial con China”.

La visita oficial del presidente de Brasil, Lula da Silva, en abril de 2023, coronó 15 acuerdos comerciales bilaterales valorados en unos US$10.000 millones.

Entre los principales productos que exporta hacia China se encuentran la soja (35,4%), hierro (20,2%), petróleo (18,6%), carne de vacuno congelada (8,82%) y pasta de celulosa (3,36%), de acuerdo con datos del Observatorio de Complejidad Económica (OEC, por sus siglas en inglés).

Chile

En 2023, las exportaciones chilenas a China superaron los US43.000 millones, mientras que su superávit con China se ubicó en US$23.000 millones, de acuerdo con datos de la Administración de Aduanas de la República Popular China.

El cobre (en bruto y refinado) es con diferencia el principal producto que exporta Chile hacia China, según datos del OEC.

Otro producto destacado son las frutas sin hueso, de las cuales Chile es el principal exportador del mundo y China, la mayor importadora. En 2022, el valor de las frutas de este tipo que Chile envió a China alcanzó los US$2.450 millones, supliendo más de dos tercios de las importaciones chinas, que se ubicaron en US$3.580 millones.

El país trasandino también tiene superávit en el intercambio con su primer socio comercial.

El éxito de Chile se debe en parte a la promoción de su “marca nacional” en la República Popular China. Chile ha comercializado con éxito sus uvas, cerezas y arándanos como “bienes de lujo”, asociados con festividades navideñas y entrega de regalos, lo que le permitió venderlos a un precio superior, incluida su importación y envío por medios costosos, como aviones y contenedores refrigerados”, señaló Ellis en un artículo publicado en diciembre de 2023.

Perú

Con exportaciones que en 2023 superaron los US$25.000 millones (en especial compuestas por minerales y alimentos para animales) y uno de los que mayor superávit consiguieron en la balanza bilateral, US$ 13.000 millones, cuadruplicó sus ventas a China desde 2010, de acuerdo con un análisis reciente de la Fundación Andrés Bello – Centro de Investigación Chino Latinoamericano.

Entre la gran diversidad de minerales que le despacha anualmente, en los que se incluyen hierro, zinc y metales preciosos, pero fundamentalmente cobre.

México

En 2023, las exportaciones del país de América del Norte a China sumaron más de $18.000 millones, pero sus importaciones superaron los US$81.000 millones, lo cual hizo que el déficit comercial trepara a nada menos que US$ 62.000 millones.

Aún así, el país azteca le vende productos manufacturados y no sólo materias primas, por lo que más que ser economías complementarias más bien son competidoras, lo que se puso de relieve desde el ingreso de China a la Organización Mundial de Comercio.  

Así, por ejemplo, en febrero de 2024 las principales exportaciones mexicanas al gigante asiático estuvieron conformadas por circuitos integrados (US$232 millones), instrumentos médicos (US$150 millones), metales preciosos (US$91 millones), cobre (US$73 millones) así como motores, partes y accesorios para vehículos (USS71 millones), de acuerdo con cifras del OEC.

Liu Xuedong, profesor de la Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México, “En este contexto, los flujos comerciales en cuestión no son sólo los bilaterales entre China y México, y México y Estados Unidos, sino también los flujos comerciales trilaterales China-México-Estados Unidos que vinculan a los tres países en los que México se ha convertido en un “trampolín y lugar de montaje” con creciente presencia de productos en el mercado norteamericano”, escribió en un artículo reciente publicado por la revista digital ThinkChina.

"En este contexto -agregó-, los flujos comerciales en cuestión no son sólo los bilaterales entre China y México, y México y Estados Unidos, sino también los flujos comerciales trilaterales China-México-Estados Unidos que vinculan a los tres países en los que México se ha convertido en un “trampolín y lugar de montaje” con creciente presencia de productos en el mercado norteamericano”.

Ecuador

Exportó en 2024 a China más de US$7.900 millones, que lo convierten en el quinto país de América Latina que más le vende y con el que tuvo un superávit comercial de más de US$1.900 millones.

Firmaron un acuerdo de libre comercio en mayo de 2023 que se estima ayudará a incrementar las exportaciones ecuatorianas en 30% durante los primeros tres años de su entrada en vigor.

Entre los productos ecuatorianos más exportados hacia China se incluyen los crustáceos, mineral de cobre y minerales de metales preciosos, según datos del OEC.

Entre otros productos destacados -y que se espera que resultan beneficiados por el acuerdo comercial- se encuentran las bananas, cuyas ventas se prevé habrán de duplicarse, y el cacao.

Francisco Miranda, presidente de la Asociación Nacional de Exportadores de Cacao de Ecuador, explicó al suscribirse el acuerdo comercial que el mercado chino se convirtió en uno de los más rentables para la venta de cacao gracias, entre otras cosas, a que los consumidores están dispuestos a pagar extra para obtener un producto de calidad premium.