Después de lo que fue un 2022 magnífico para el capitán argentino Lionel Messi en su carrera profesional, con la obtención del Mundial en Qatar, en este 2023 pudo sacarse un peso de encima y sorprendió a todos cuando se bajó del alto nivel de las ligas europeas para pasar a la MLS y a un equipo que no peleaba por nada.

Su consagración en la Copa del Mundo le otorgó un respeto indiscutible, silenciando a aquellos que alguna vez cuestionaron su trayectoria. No obstante, Messi vivió un cierre de 2023 notablemente distinto.

El primer semestre lo transcurrió en el Paris Saint-Germain, donde cumplió su contrato antes de dar un giro sorprendente a su carrera al mudarse a la Major League Soccer para unirse al Inter Miami.

Con el PSG obtuvo la Ligue 1, pero optó por no renovar. A pesar de coquetear con un regreso al Barcelona, diversas complicaciones lo convencieron de que la mudanza a Estados Unidos era la opción más adecuada para su carrera.

Ya en Estados Unidos, Messi se integró a un equipo que luchaba en la parte baja de la tabla y, aunque no logró llevarlo a los playoffs, contribuyó a mejorar la imagen del equipo y fue parte fundamental de la primera conquista en la historia del Inter Miami al ganar la Leagues Cup.

Su decisión resultó acertada. En Inter Miami, bajo la dirección de Gerardo Martino, el rosarino experimentó una mejora significativa en su juego, liberado de la presión que antes cargaba sobre sus hombros. Cada partido reflejaba su felicidad por este nuevo capítulo tanto para él como para su familia en Florida.

En la Selección, a pesar de enfrentar alguna lesión que lo marginó de algunos encuentros, cerró el año con un triunfo histórico ante Brasil en el Maracaná, posicionándose como líder en las Eliminatorias Sudamericanas.

En términos estadísticos, durante el 2023, Messi participó en un total de 44 partidos entre PSG, Inter Miami y Argentina, abarcando todas las competiciones. En este periodo, anotó 28 goles y contribuyó con 12 asistencias.

A sus 36 años, Messi no solo ha recobrado el placer por el juego, sino que también demuestra un apetito insaciable por los títulos.