Werner Ferrari es un asesino serial suizo que en su país abusó sexualmente y estranguló a cinco niños.

Nacido el 29 de diciembre de 1946, este sujeto cometió los crímenes entre 1971 y 1989 cuando logró ser detenido y condenado a prisión perpetua.

Su método consistía en secuestrar o alejar a los chicos de las fiestas populares, abusar de algunos de ellos y luego estrangularlos.

Ferrari creció en varias guarderías y era considerado un pequeño introvertido. Ya de adulto realizó diversos trabajos como jornalero, pero en  1971, cometió su primer asesinato en Reinach, Basilea-Campiña, donde mató a Daniel Schwan, de 10 años. 

Por este homicidio, fue condenado a 10 años de prisión y liberado después de 8 años del centro de detención de Regensdorf en Zúrich .

Entre mayo de 1980 y agosto de 1989, once niños de entre 6 y 14 años fueron secuestrados en ocho cantones suizos diferentes.

Si bien ocho fueron brutalmente asesinados, hoy tres siguen desaparecidos: Peter Roth, de 8 años, quien se ausentó de Mogelsberg; Sarah Oberson (6) de Saxon; y Edith Trittenbass (9) de Gass-Wetzikon.

Esta investigación se considera la más larga de la historia de Suiza, con una duración de casi diez años.

El 30 de agosto de 1989, cuatro días después del asesinato de Fabienne Imhof, Ferrari de manera increíble, llamó por teléfono a la Policía y aseguró que no tenía vinculación con la muerte del niño.

Sin embargo, poco tiempo después fue detenido en su departamento de Olten y confesó cuatro asesinatos, pero negó su vínculo con el homicidio de Ruth Steinmann, de 12 años, que fue 
encontrada el 16 de mayo de 1980 en una zona boscosa cerca de Würenlos.

En 1995, Ferrari fue condenado por el Tribunal de Distrito de Baden por cinco asesinatos a cadena perpetua, incluido el crimen de Steinmann. 

Pero siete años después, una investigación del periodista y autor Peter Holenstein reveló pistas de que este sujeto no podía ser responsable de aquel asesinato. 

Entre otras cosas, el análisis de ADN reveló que un vello púbico encontrado en el cuerpo de Steinmann no coincidía con el de Ferrari.

Gracias a la investigación de Holenstein, el Tribunal Supremo del cantón de Argovia anuló la condena de 2004 contra Ferrari en el caso Steinmann y la remitió al Tribunal de Distrito de Baden 
para su nueva evaluación. 

En ese caso, apareció otro sospechoso que se había suicidado en Wolfhalden en marzo de 1983. 

Un informe dental del Servicio Científico de la Policía Municipal de Zúrich reveló marcas de mordeduras en el cuerpo de la niña, que seguramente no eran de Ferrari, sino del sospechoso que  se parecía mucho a él y que decidió quitarse la vida.

Ferrari finalmente fue absuelto del asesinato de Steinmann el 10 de abril de 2007 por el Tribunal de Distrito de Baden, pero en la actualidad sigue encarcelado por otros cuatro asesinatos:  Benjamin (asesinado en 1983, a los 10 años en Kloten), Daniel (fallecido en 1985, a los 7 años en Rümlang); Christian (asesinado en 1987 a los 10 años en Windisch); y Fabienne (fallecida en 1989 a los 9 años en Hägendorf).