Un activismo cívico de padres controla que se cumplan los 180 días de clases de la ley
Contraponen el derecho de los docentes a parar con el de los niños a tener la continuidad escolar. E invitan a las familias de todo el país a informar todos los motivos.
La red de familias y padres organizados por la Educación emprendió una campaña para visibilizar en todo el país las escuelas que no están teniendo clases y a tal efecto invitó a reportar las anomalías.
“De esta forma ayudamos a generar información de primera mano sobre días sin clase y las causas”, destacó María José Navajas, cofundadora de Padres Organizados e historiadora del Instituto Ravignani.
Actualmente, en la web de Padres Organizados se puede dejar constancia de los días sin clase y señalar los motivos.
La vocera de la ONG aclaró al respecto que los paros docentes no son la única causa, sino que "hay problemas de ausentismo, climáticos, de infraestructura escolar, asuetos que se anuncian intempestivamente sin justificativo y requerimos el compromiso de las familias a que lleven todos los días los chicos a la escuela".
No obstante, admitió que “los paros docentes han sido un problema grave que ha afectado la escolaridad de los chicos. En algunas provincias, particularmente como Santa Cruz, Chubut, Neuquén, los chicos terminan la escolaridad sin tener garantizado ni siquiera el 50% de los días de clase”.
”No hace falta explicar qué impacto esto tiene, pero nuestro planteo no es luchar contra el derecho a huelga, que es el derecho de los docentes, sino cambiar la perspectiva y poner en discusión el derecho de los chicos, que jamás es atendido o no es priorizado. Tenemos leyes que hablan del interés superior del niño y esto no está sobre la mesa”, enfatizó.
“Entonces lo que planteamos fue: a nuestras autoridades, a las que se postularon para ser gobernadores, presidentes, que eligieron a sus ministros, cómo iban a garantizar lo que establece la ley, que son 180 días de clase”, sostuvo.
Un Pacto de Mayo sin educación
La respuesta fue la omisión. La educación ni siquiera figura en el anunciado Pacto de Mayo.
Fue el reclamo que cursaron seis organizaciones de la sociedad civil (Padres Organizados, la Coalición por la Educación, Educar 2050, Conciencia, Cippec, y Potenciar Argentina), a la que adhirieron otras 50: más federaciones, asociaciones civiles, colegios profesionales, y asociaciones de colegios, entre otros, que se fueron sumando.
Propusieron que el artículo primero del Pacto de Mayo sea: “La educación es el motor del desarrollo social, económico y democrático. La mejora continuada de su calidad tendrá prioridad en las políticas públicas. La alfabetización temprana es un primer paso urgente”.
Se fundamentó la iniciativa en que “hoy, en la Argentina, apenas el 13% de los ingresantes al nivel primario llega al último año de la escuela secundaria en el tiempo teórico esperado y con aprendizajes satisfactorios en lengua y matemática", como primer punto.
Luego, que "la mayoría de los estudiantes de 15 años en la Argentina no alcanza un nivel mínimo de competencia en matemática (73%), lectura (55%) y en ciencias (54%), de acuerdo a los resultados de PISA 2022".
Prosigue el documento que difundieron de manera conjunta que "las pruebas ERCE de la Unesco muestran que uno de cada dos estudiantes de tercer grado de primaria tiene dificultades para comprender un texto”.
Deserción escolar
Le hicieron llegar el cuadro de situación a distintas instancias del gobierno nacional, desde la Secretaría de Educación hasta el Ministerio de Capital Humano, a cargo de la ministra Sandra Pettovello,
“Uno de cada tres niños de tres años no asistió nunca a un establecimiento educativo. Estos datos son apenas una muestra de la situación crítica que atraviesa la educación en la Argentina", dispara la presentación.
Y al mismo tiempo pone de relieve que este diagnóstico está atravesado por profundas desigualdades geográficas, de nivel socioeconómico y de género, lo que coincide con la denuncia hecha por el CEA de la Universidad de Belgrano acerca del incumplimiento de la ley de Jornadas Escolares Extendidas, que es casi totalmente violada por muchas de las jurisdicciones.
Expresa asimismo que "en un contexto en el que seis de cada diez niños son pobres, no hay futuro común posible sin dar a la educación la máxima centralidad en la agenda pública y la más alta prioridad en todos los niveles de gobierno".
Hace hincapié en que "una educación de calidad es una condición básica para que las personas puedan llevar adelante su proyecto de vida y ejercer una ciudadanía democrática”.
Y finalmente agrega: “Una educación de calidad es el pilar fundamental para construir un país con un desarrollo inclusivo y sostenido".
Padres Organizados es una red federal de padres y madres que trabajan cotidianamente para atender los problemas que afectan a la educación de los chicos.
Uno de los temas que están trabajando es el de la continuidad escolar.
Es decir, que se garanticen los días de clases previstos por ley. “Sabemos que es una cuestión básica: sin continuidad los aprendizajes se diluyen y no se fortalecen”, subrayan.