Sigue la investigación por los abusos en Punta Alta y en una nueva audiencia indagatoria el papá de las víctimas declaró que sus hijas lo denunciaron porque no recibieron cariño por parte de él.

En esta causa, que quedó en manos de la UFI N°14 del departamento judicial de Bahía Blanca, se investiga a un papá, a una abuela, un tío y un padrino por drogar, abusar y explotar sexualmente a dos nenas de 6 y 12 años. 

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“El padre dijo que no habían existido los hechos y manifestó que estas imputaciones, las víctimas, las hacen en función que él no demostraba cariño hacia ellas”, explicó la fiscal Marina Lara. 

Luego, quién tomó la palabra fue el padrino de una de las víctimas y aseguró: “Las chicas declararon eso porque habían sido inducidas por la madre en función del divorcio que se estaba llevando adelante con el padre”.

Punta Alta: el padre de las menores abusadas sostuvo que lo denunciaron por "falta de cariño"
Así se disfrazaba la abuela para amenazar a sus nietas

En 2019, las menores de edad denunciaron que los reiterados abusos ocurrieron entre 2011 y 2014 y tras varios años de investigación, hace semanas se pudo conseguir un avance importante en la causa.

Si la Justicia encuentra culpables a la abuela, el papá y el padrino podrían recibir una pena máxima de 50 años de cárcel por los delitos de promoción y explotación de menores de edad agravados, y suministro de estupefacientes. Mientras que al tío se lo condenaría por abuso sexual gravemente ultrajante y reiterado.

Una de las víctimas en su declaración sostuvo que su abuela era la jefa de la banda y que le daba somníferos, así como también la amenazaba de muerte a ellas o a algún ser querido para explotarlas sexualmente.

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Además, se colocaba un disfraz para asustarlas y les decía que “les iban a suceder cosas” si no ayudaban en lo que les pedía. 

La mujer está con prisión domiciliaria por su avanzada edad, mientras que los demás imputados están detenidos. El papá de las menores es miembro de la Armada y por este motivo miembros de Establecimientos Navales encabezaron un allanamiento en el Edificio Libertad, donde vivía el padre de las jóvenes abusadas.