Protesta de maestras de La Matanza contra denuncias de abusos en jardines
"Estamos en peligro", alertan. Aseguran que son separadas de sus cargos por acusaciones falsas, mientras sus casas terminan incendiadas y saqueadas.
Un grupo de maestras jardineras del partido bonaerense de La Matanza se movilizó este viernes a la dirección de inspección local para exigir protección ante las constantes denuncias por abuso sexual de niños que recibe el personal de los establecimientos.
La protesta se llevó a cabo en la jefatura de inspección (DGCYE) situada en Pueyrredón al 2200, en Ramos Mejía.
Según dijeron, en los últimos años se verificaron denuncias contra el personal de 16 jardines del distrito.
Explicaron que "las docentes fueron retiradas violentamente de sus cargos, padeciendo maltrato social, de los medios de comunicación y de las inspectoras, que le exigieron aislamiento", adujeron.
"No se arbitran medios de protección y hoy sigue sucediendo. Estamos en peligro", alegan las educadoras nucleadas en un grupo denominado "Docentes de inicial organizadas", que resaltaron la falta de apoyo de dirigentes gremiales del sector.
La intención de las docentes era entregar un petitorio y llevar la inquietud a las autoridades educativas locales, pero se retiraron sin ser recibidas.
LEÉ: Confirmaron la nueva pena contra Jonathan Fabbro por violar a su ahijada
Marcela, una docente de 31 años de trayectoria, indicó, en diálogo con el sitio No Ficción Web, que la manifestación es por "las sucesivas denuncias falsas en contra de docentes y auxiliares de los jardines".
Las docentes describieron como tras las denuncias son amenazadas para que revelen los domicilios de las personas acusadas y sus casas terminan atacadas, vandalizadas y en muchas ocasiones incendiadas. "Queremos proteger a nuestros compañeros varones. Por ser hombres no tienen que hacer necesariamente cosas malas", expresó otra de las docentes al aludir que en muchos casos las denuncias apuntan al personal masculino.
"Estamos cansadas de ser acusadas de abusar y violar a nuestras niños. Cuidamos a nuestras infancias como a nuestros propios hijos", expresó.
Entre las manifestantes se encontraba Silvana, quien es docente y cuñada de Carlos Guzmán, un auxiliar que fue acusado de abusar de niños en el jardín 949, de Isidro Casanova: "Mi hermana es docente de nivel inicial y contadora. Mi hermano es colectivero. Somos gente de trabajo. Tenemos una familia hermosa. Mi cuñado es un ser de luz que cuida a mi hermana porque está cursando una enfermedad de cáncer. En este momento mi familia está devastada. La casa donde vivía mi hermana fue incendiada y le robaron todo. No tienen ni ropa para ponerse".
"Le tuvimos que pagar millones a un abogado. Mi cuñado no está ahora detenido, pero sigue vinculado a la causa. La Justicia es muy lenta. Sabemos que el abuso de un chico pasó en su entorno familiar", agregó.