La investigación por la pegatina de carteles en la vía pública contra la Vicepresidenta de la Nación Cristina Kirchner denunciándola como “asesina” y culpable de “35.000 muertes”, está siendo disputada por dos juzgados.

Es que la causa se inició originalmente en una fiscalía penal y contravencional porteña a cargo de Mauro Tereszko, quien en las últimas horas allanó nuevamente un domicilio en Morón en búsqueda del hombre que ordenó la confección de la cartelería.

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Pero paralelamente, el empresario Enrique Albistur hizo otra denuncia por la cual interviene el fiscal Leonel Gómez Barbella y el juzgado de Manuel de Campos, donde también se investigan a las mismas personas. El empresario acusa una estafa, pues la cartelería estaba ubicada en los espacios que él publicita en sus empresas. Albistur es un empresario vinculado al presidente Alberto Fernández, pues es pública la relación de amistad de que los une sumado a que aquel es marido de la diputada del Frente de Todos Victoria Tolosa Paz.

En las últimas horas, el fiscal Gómez Barbella le pidió a su par de la Ciudad que ceda la competencia y le entregue el expediente. Justificó que lo que él investiga son delitos más graves como el de defraudación, y vaciamiento empresarial, entre otros hechos. Por ahora, el juez De Campos pidió “certificar” la causa existente en la Ciudad de Buenos Aires a fines de saber si son los mismos hechos que se denunciaron en la Justicia Nacional.

Por lo pronto, la investigación en Ciudad tiene cinco imputados y se está tratando de identificar al hombre que ideológicamente ordenó la confección de los carteles y su posteo en la vía pública.