El robo cometido bajo la modalidad "motochorros" bajó en 2021 un 51 por ciento en la Ciudad, respecto de 2019, al tiempo que las tasas de los distintos delitos fueron las más bajas de los últimos 27 años, informó el Ministerio de Justicia y Seguridad porteño tras dar a conocer los resultados del Mapa del Delito elaborado con cifras del año pasado.

Asimismo, el robo automotor descendió el año pasado un 49 por ciento respecto a 2019 y bajó un 89 por ciento si se toma como referencia 2002, cuando se registraron 6.667 hechos -la marca máxima- contra 725.

En tanto, los homicidios dolosos -el único rubro que no bajó, pero que arrojó números similares- se mantuvieron el año pasado en una tasa del 3,3 cada 100 mil habitantes (hubo 103 casos), número similar al registrado en 2019, cuando se produjo la cifra más baja desde 1995, con 102 hechos frente a 127 de 2020.

Esta estadística generó que la ciudad de Buenos Aires sea la segunda capital de América con la tasa de homicidios cada cien mil habitantes más baja, después de Ottawa.

"En la Ciudad, siempre gobernamos en base a los datos y a la evidencia. Porque esa es la única manera de saber dónde estamos parados, qué estamos haciendo bien y qué tenemos que mejorar. Con el Mapa del Delito, año tras año tenemos estadísticas serias y confiables que nos permiten diseñar mejor nuestra lucha contra el delito y llevar adelante con mayor eficiencia nuestro Plan Integral de Seguridad Pública", sostuvo el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta".

En tanto, el ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad, Marcelo D´Alessandro, aseguró que "esto es el resultado de una política implementada a partir de 2017 con la creación del Sistema Integral de Seguridad Pública y la Policía de la Ciudad que modernizó el trabajo y unificó el abordaje de la lucha contra el delito, con más policías en la calle, más capacitación, equipados con la mejor tecnología, cercanos a la gente y con un control de gestión civil".

"Todo este trabajo está haciendo que la cifra de delitos siga descendiendo y así seguir logrando una Ciudad segura para los vecinos", añadió D´Alessandro.

Para estas cifras se tomó como referencia 2019, ya que en 2020 se produjo la pandemia por coronavirus y los habitantes del país permanecieron aislados en sus respectivas casas.

El delito de "motochorros" era uno de los que daba números en rojo en la Ciudad, pero en 2021 fue revertida la estadística, ya que bajó un 51 por ciento respecto de hace dos años y un 59 por ciento en referencia a 2018, cuando se registró el máximo de casos, con 11.271.

El robo armado también cayó en 2021 un 38 por ciento respecto a 2019, al tiempo que el uso de armas representó el 19 por ciento del total de robos cometidos, cuando dos años atrás esa proporción había sido del 22 por ciento.

En tanto, los hurtos bajaron en 2021 un 26 por ciento, respecto de 2019, y cayeron un 43% comparado con el 2000, cuando se produjo la mayor cantidad de casos.

Por otra parte, en relación a los homicidios ocurridos en los asentamientos porteños o "Barrios Populares", en la Villa 31 y 31 bis de Retiro, cuya seguridad está a cargo de la Ciudad, se produjo un descenso del 64 por ciento tras pasar de 14 hechos en 2019 a 5 en 2021.

En cambio, en la Villa 1-11-14/Rivadavia/Illia, cuya seguridad está a cargo de las fuerzas federales, los crímenes pasaron de 5 en 2019 a 14 en 2021, lo que representa un aumento del 180 por ciento.

Con toda esta estadística, los números finales determinaron que los delitos en la Capital Federal arrojaron los índices más bajos de los últimos 27 años (1995), incluso por debajo de los que tuvo 2019, que había sido el mejor año en materia de estadísticas criminales, detalló la cartera de Justicia y Seguridad.

El Mapa del Delito fue dispuesto mediante la ley 5.688 que creó el Sistema Integral de Seguridad Pública de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y a la Policía de la Ciudad, los datos son públicos y su actualización es anual.

Rodríguez Larreta señaló que "hoy, los datos muestran un logro contundente, ya que casi todos los delitos siguen bajando, al punto de que la Ciudad hoy tiene las tasas de delito más bajas de los últimos 27 años".

"Y este es el resultado de tener la decisión política de enfrentar el delito. La seguridad es una decisión política. Una decisión que requiere coraje, firmeza y un plan serio a largo plazo que vaya resolviendo uno a uno los problemas de seguridad", agregó.

Por su parte, el jefe de Gabinete de la Ciudad, Felipe Miguel, remarcó que "cuando se trabaja con planificación, analizando las estadísticas, diciendo la verdad, reconociendo el punto de partida y, sobre todo, con esfuerzo y constancia, los resultados se ven".