Los británicos Jac Rhys Hopkins y Josey McNamara, amigos de la actriz Margot Robbie y la modelo Cara Delevingne, fueron liberados, tras ser detenidos por agredir a un fotógrafo, pero fueron imputados por "lesiones graves dolosas" y no podrán salir del país.

Así lo dispuso la Justicia, que además, se les retuvo el pasaporte y se les "impuso una caución real por la suma de 200.000 pesos a cada uno", acusados de fracturarle el codo a Pedro "Peter" Orquera cuando intentó tomarle unas imágenes mientras ambas mujeres se encontraban cenando en un restaurante del barrio porteño de La Boca.

Ambos sujetos declararon ante la fiscal Catalina Neme y luego quedaron en libertad, pero con la prohibición de salir del país sin autorización judicial.

Asimismo, se conoció el video de la agresión al fotógrafo, ya que las imágenes fueron captadas por una cámara de seguridad de la zona.

El episodio se registró en la noche del sábado en las inmediaciones de Patagonia Sur, lugar donde estaban las dos mujeres extranjeras y el trabajador tuvo que ser trasladado al hospital, por lo que deberá ser operado en las próximas horas.

"Después de sacar unas fotos sufrí la tremenda agresión de parte de la gente de seguridad, o los patovicas, porque no se cuál es el vínculo que tienen con ellas", señaló Orquera en diálogo con La Nación y, debido a la brutal golpiza que le propinaron los custodios, el reportero gráfico sufrió una fractura expuesta en su codo derecho y una herida sangrante en la cabeza.

Según indica la denuncia policial que hizo Orquera, Jac Rhis Hopkins y Josei Mac Namara Callum, dos ingleses que en principio se dijo que eran custodios, pero luego se confirmó que eran amigos de Robbie y Delevingne, quisieron evitar que difunda las imágenes de ellas y, para esto, lo persiguieron y lo golpearon.

"Estaba haciendo una cobertura y descubrí que las mujeres estaban acá, así que fui", le contó Orquera al citado medio, a la vez que relató: "Después de sacar unas fotos sufrí la tremenda agresión de parte de la gente de seguridad, o los patovicas, porque no se cuál es el vínculo que tienen con ellas". 

Además dijo: "Sufrí una encerrona terrible y después tuve una persecución, porque me corrieron. Yo iba con la cámara en la mano tratando de resguardarla a ella y al material. En un momento sentí como que alguien me pateó y me empujó. A toda velocidad fui a parar al piso y menos mal que caí con el brazo y no con la cabeza.

Fue tremenda la pérdida de sangre que tuve, me quedó el hueso al descubierto, me rompí todo el brazo y la cámara voló por el aire".

"La Policía acudió rapidísimo y la ambulancia del SAME también. Ahí mismo vi que uno de los agresores había quedado dando vueltas por la zona y la policía lo detuvo enseguida", recordó, tras lo cual fue trasladado hacia el Hospital Argerich donde fue asistido.

En tanto, los agresores habían quedado detenidos por orden de la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas número 34 por "lesiones graves".