Un hombre quedó al borde del juicio oral y público por haber matado de un disparo a una joven que iba a bordo de su moto luego de errar el tiro dirigido a una persona que presuntamente lo había agredido. 

El hecho ocurrió el 24 de abril a las 18:15 cuando el hombre discutía con otro en la plazoleta ubicada en la intersección de las calles La Milagrosa y Monteagudo, de la Villa 21-24, de la Capital Federal. 

Allí le disparó a quien él dijo que era su agresor, pero falló el tiro y el mismo impactó sobre una mujer que iba junto a otra a bordo de una motocicleta. Por el disparo, la conductora cayó al piso y fue trasladada al Hospital Penna con una lesión en el cuello.

 “Amiga me dieron”, le alcanzó a decir a la otra joven y, tras estar internada, falleció a raíz de la herida de arma de fuego que recibió en la región cervical y el tórax, lo que le produjo una hemorragia interna y un posterior en paro cardiorrespiratorio. 

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La Justicia estableció: “Lejos estamos de un supuesto que pueda ser considerado como un accionar negligente o imprudente. Disparar un arma de fuego en un espacio público -plazoleta- y en un horario en el cual es común que transiten personas, lleva implícito la posibilidad de una consecuencia fatal para cualquiera que se encuentre allí”. 

“Más cuando la bala ingresó a la altura del cuello de la víctima, lo que, en principio, descarta que se haya apuntado al piso como pretende sostener la defensa”, sostuvieron los camaristas Ricardo Pinto y Magdalena Laiño.

En la causa, el acusado no negó el hecho, pero dijo que se trató de un homicidio culposo, es decir, que no tuvo intención de matar a la joven y que se trató de un error al disparar.

Pero la Cámara lo procesó por homicidio simple por dolo eventual, que contempla hasta 25 años de prisión porque tuvo que representarse el resultado al disparar un arma de fuego en un lugar concurrido.