Entre Ríos: un conductor evitó un control de alcoholemia y atropelló a un agente de tránsito
El hecho sucedió en Paraná y el remisero arrastró casi 100 metros al personal que estuvo internado con lesiones leves
Otro hecho repudiable sucedió en Paraná, Entre Ríos, cuando un conductor quiso evitar un control de alcoholemia y atropelló a una agente de tránsito arrastrándolo casi 100 metros arriba de su capot por la avenida Laprida. El remisero se dio a la fuga y horas más tarde se entregó luego de que la policía lo haya localizado por las cámaras de seguridad. Se le realizó el análisis de sangre y orina para constatar el nivel de alcohol y el auto quedó secuestrado para las pericias.
Todo momento quedó registrado por una persona que estaba en el lugar y esto permitió que la justicia actúe de inmediato. Laureano Lutini, agente atropellado, estuvo unas horas internado y se constató que solo tuvo lesiones leves. El personal señala que el hombre en todo momento se resistió al control y que por eso se encerró en su vehículo y arrancó sin mediar quien tenía adelante.
A su vez recuerda que el automovilista comenzó a hacer zigzag para que él cayera al piso y pudiera escapar de la escena dejándolo tendido en el piso. En medios locales el inspector aseguró que hará la denuncia correspondiente contra el remisero de 29 años. El acusado fue indagado en libertado y el vehículo, Chevrolet Corsa, fue trasladado a la dependencia municipal para que se realicen las pericias correspondientes.
El hecho sucedió ayer alrededor de las 20:30 horas cuando inspectores de la municipalidad realizaban diversos controles de alcoholemia a automóviles que circulaban por la avenida. Esta mañana el intendente de la localidad,
Adán Bahl, se manifestó en Twitter sobre el suceso: "Quiero expresar mi repudio por lo que sucedió en Paraná, ha sido lamentable e inadmisible", manifestó el intendente en redes sociales, y reseñó: "Un trabajador municipal fue atropellado por el conductor de un remis, que intentó evadir un control de documentación y alcoholemia".
"Exigir el cumplimiento de las normas en un marco de respeto y convivencia entre vecinos es tarea diaria de nuestro municipio, y no debería poner en riesgo la vida de nuestros trabajadores", concluyó.