La causa en la que dos ciudadanos chinos están acusados de haber mantenido cautivo a un hombre durante una semana en una casa del barrio porteño de Núñez fue elevada a juicio.

Así lo solicitaron en las últimas horas los responsables de la Fiscalía Criminal y Correccional Federal N°8 de la Ciudad de Buenos Aires y de la Unidad Fiscal Especializada en Secuestros Extorsivos (UFESE), Eduardo Taiano y Santiago Marquevich.

De acuerdo con la investigación, y según publicó el Ministerio Público Fiscal de la Nación, en la madrugada del 1° de enero pasado, tras festejar el año nuevo con amigos en un bar de la calle Azcuénaga al 100, en el barrio de Balvanera, la víctima, también ciudadano chino, fue interceptada por un auto Honda Civic, del cual descendieron los dos imputados y un tercer hombre, mientras que un cuarto cómplice permanecía al volante, y lo obligaron a subir al vehículo.

Toda la secuencia quedó registrada en una cámara de seguridad de la zona.

Una vez en el interior del auto, los captores amenazaron y golpearon a la víctima, a quien trasladaron a una vivienda de la calle 11 de Septiembre al 3500, en el barrio de Núñez, donde lo ataron a una silla con precintos y cuerdas.

Horas después, los captores se comunicaron con la familia de la víctima, que reside en la República Popular de China, y le exigieron 300 mil dólares por su liberación.

El cuñado del hombre avisó a un amigo de éste, con el que la víctima vivía, y fue quien realizó la denuncia.

Tras la denuncia, personal de la División Operativa Central de la Policía Federal realizó un seguimiento a través de las cámaras del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, lo cual permitió establecer el dominio del vehículo en el que se desplazaban los captores, y se supo que el auto estaba registrado a nombre de uno de los imputados.

Luego de dos días de cautiverio, la víctima fue trasladada a otro domicilio, para luego ser devuelta a la vivienda donde estuvo las primeras horas.

Desde allí fue liberada en la madrugada del 8 de enero, en el marco del allanamiento oportunamente ordenado, en el cual se detuvo a dos de los captores, también de nacionalidad china, sin que se llegara a pagar rescate.

En su declaración, la víctima reconoció a dos de sus captores, quienes eran conocidos de su cuñado, al tiempo que manifestó reconocer el lugar de cautiverio, por haber concurrido a tomar el té en 2018.

La víctima sostuvo también que, mientras estuvo cautivo, sus secuestradores lo obligaron a firmar un compromiso de pago y en idioma chino por la suma de 270 mil dólares y con fecha de 2019.

Tras la investigación, los fiscales solicitaron al responsable del Juzgado en lo Criminal y Correccional Federal N°12, Sebastián Casanello, que los dos hombres fueran a juicio como coautores de secuestro extorsivo agravado por la participación de tres o más personas y lesiones leves agravadas por haber sido efectuadas para consumar otro delito.