En una zona residencial de la Ciudad de Buenos Aires se encuentra escondido un barrio inglés que se destaca por su estilo de arquitectura anglosajona y por contar con una serie de casas que fueron construidas al inicio del Siglo XX y que hoy pueden llegar a valer en promedio medio millón de dólares. 

Este pequeño barrio está ubicado en Caballito y lo delimitan las intersecciones de las elegantes avenidas Pedro Goyena y Del Barco Centenera, además de las calles Emilio Mitre y Valle. Apenas a dos cuadras de esta pequeña urbanización se encuentra una atracción que también es de origen británico: el histórico tranvía de Buenos Aires que rueda todavía y hace viajes turísticos durante los fines de semana. 

De hecho, este barrio histórico inglés surgió a raíz de la construcción del Ferrocarril en la Ciudad de Buenos Aires que fue desarrollado por ingenieros y trabajadores ingleses que se asentaron en la Argentina y necesitaban urbanizaciones en dónde vivir. 

Cómo es el barrio inglés escondido en Buenos Aires con casas que valen medio millón de dólares

Según las crónicas de la época el barrio inglés de Caballito comenzó a construirse en 1923 con una línea de créditos otorgada por Banco El Hogar Argentino y su desarrollo estuvo a cargo del ingeniero Pedro Vinent y los arquitectos Eduardo Lanús y Coni Molina. 

Las casas de este barrio suplen tener un pequeño patio delantero y generalmente no cuentan con cocheras debido a que en el período histórico en el que fueron construidas no se solía incluirlas en el diseño. La mayoría aún conserva la estructura de madera original de sus escaleras y también herrajes externos que fueron incluidos en la construcción. 

Actualmente, la mayoría de estas casas se encuentran en un perfecto estado y tienen precios que oscilan entre los 400 y 650 mil dólares según los ambientes que cuentan y las comoidades con las que fueron construidas. 

Cómo llegar hasta el Barrio Inglés de Caballito 

El barrio inglés está ubicado en la zona más turística y gastronómica de Caballito, rodeados de bares, restoranes y confiterías. Se puede llegar fácilmente desde cualquier punto de la Ciudad de Buenos Aires en transporte público y disfrutar de su estilo arquitectónico que mezcla la corriente Tudor (inglés) con algunos detalles de la arquitectura francesa e italiana.