Comienza el juicio contra 13 policías por el crimen de Blas Correa en Córdoba

El miércoles 7 de septiembre comenzará el juicio contra 13 Policías acusados del crimen y encubrimiento del joven Valentín Blas Correa en Córdoba a mediados del 2020.

Por el crimen hay dos Policías acusados: Javier Alarcón y Lucas Gómez, de este último salió la bala que mató a Valentín, en la cuál se los imputa por homicidio agravado por el uso de arma de fuego y calificado por ser miembros de una fuerza de seguridad.

Mientras que otros seis como autores del delito de encubrimiento y omisión de deberes de funcionario público:  Sergio Alejandro González, Wanda Micaela Esquivel, Yamila Florencia Martínez, Walter Eduardo Soria, Enzo Gustavo Quiroga y Jorge Ariel Galleguillo.

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Por falso testimonio y encubrimiento Leonardo Alejandro Martínez, Rodrigo Emanuel Toloza Ezequiel, Agustín Vélez y Leandro Alexis Quevedo y por último solo por encubrimiento Juan Antonio Gatica.

Asimismo la mamá de Valentín culpó de abandono de persona a las autoridades del Hospital donde sus amigos quisieron llevarlo para que lo atiendan pero que lamentablemente se negaron. Este acto generó que Blas perdiera más sangre y falleciera minutos después en la calle cuando sus amigos quisieron llevarlo a otra clínica y la Policía se los impidió.

El 6 de agosto de 2020, una cena entre amigos, cuando las restricciones contra el Covid-19 iban disminuyendo, terminó en una noche que pocos olvidarán. El joven de 17 años recibió un disparo en la espalda cuando eran perseguidos por la Policía al no detenerse en el control policial creyendo que se trataba de un intento de robo. 

Blas iba en la parte trasera del Fiat Argo que recibió cuatro impactos de bala, uno fue el que mató a Correa mientras que los otros tres estaban distribuidos por todo el auto.

Desde que se realizó la detención en la capital cordobesa y se confirmó que el joven estaba muerto comenzó un operativo de encubrimiento y de plantar pruebas falsas contra los menores como por ejemplo colocar un arma en el baúl para que pareciera que era una persecución donde ellos atacaron a la Policía.

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Aunque para los agentes el plan había funcionado a la perfección, las pruebas que se fueron encontrando a lo largo de la investigación generó que a tres meses del crimen una de las Policías rompiera el pacto de silencio: "Cuando nos trasladaban en el móvil policial, el cabo primero Alarcón sacó un arma de su chaleco y me pidió que la tirara por la ventanilla, en un área a metros de donde el Fiat Argo evadió el control", sostuvo ante el Fiscal la agente Esquivel.

Se estima que el juicio durará tres meses al ser un caso que tiene 400 mil fojas y más de 30 audiencias por lo que recién el 25 de noviembre se conocería el veredicto de la Justicia contra los implicados.

Desde que sucedió este trágico crimen su mamá, Soledad Laciar, se puso al hombro la causa en donde pide justicia pero también que este caso no quede en vano para otras víctimas de gatillo fácil. 

Un dato que dio un giro inesperado para la familia de Blas es que una semana después del asesinato Soledad se enteró que estaba embarazada