El comisario mayor de la policía bonaerense Francisco Centurión prestaría mañana declaración indagatoria ante el fiscal Daniel Ichazo, tras haber sido detenido en las últimas horas por el crimen de Lautaro Morello y la desaparición de Lucas Escalante, en diciembre del año pasado en el partido de Florencio Varela.

Centurión, ya desplazado de la Fuerza, debió ser internado en observación en el Hospital Maternal "Mi Pueblo" de ese distrito del sur del conurbano, después de haber sido baleado en una pierna cuando intentó darse a la fuga en el momento en el que iba a ser aprehendido en su casa quinta, en la localidad bonaerense de La Capilla.

Una vez que sea dado de alta, el fiscal Ichazo, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Berazategui, espera poder tomarle declaración indagatoria. Centurión podría cumplir con ese trámite judicial este miércoles, después de entrevistarse con su abogado defensor.

En principio, el policía sería trasladado a la alcaldía de la Policía Federal en Cavia al 3300, del barrio porteño de Palermo, cuando abandone el hospital.

En tanto, los investigadores buscan avanzar en la causa por el crimen de Morello y la desaparición de Escalante y para las próximas horas se espera el resultado del análisis en los teléfonos celulares del acusado y de otros sospechosos. Centurión es el padre y el tío de los únicos dos detenidos que hay en la causa.

El comisario mayor, ex responsable del área de enlace de Interpol con la Policía Bonaerense, era investigado por Ichazo desde diciembre del año pasado, por su presunta participación en una estafa de gran escala mediante la utilización de comprobantes de compra de combustible para patrulleros.

Este lunes, personal de la Policía Federal lo detuvo, pero al intentar darse a la fuga recibió un disparo en la pierna izquierda. También su casa quinta fue allanada en el mismo operativo.

Detectives de la División Homicidios de la Superintendencia de Investigaciones Federales de la PFA lograron la aprehensión de Centurión, de quien se sospecha está involucrado en el asesinato de Lautaro Morello y la desaparición de Lucas Escalante.

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Luego de siete meses de investigación, en horas tempranas de este lunes se desplegaron varias brigadas con el objeto de llevar a cabo vigilancias programadas alrededor de cuatro domicilios con el objetivo de dar con el jefe bonaerense, a quien se le imputan los delitos de "sustracción de caudales públicos en concurso real con privación ilegal de la libertad agravada por haber durado más de un mes y por ser cometida con violencia".

Fue así que una de las brigadas, observa egresar a Centurión de su casa quinta ubicada en la localidad bonaerense de La Capilla del partido de Florencio Varela, por lo que a los pocos metros fue interceptado por efectivos policiales.

Sin embargo, el comisario mayor intentó darse a la fuga, según la información oficial divulgada a la prensa, "con un objeto oscuro en su mano".

"En su huida, gira su torso en dirección a los detectives, y ante la presunción de que el mismo esgrimía un arma de fuego, uno de los efectivos disparó al suelo para que deponga su actitud, pero el proyectil rebotó contra el asfalto y terminó impactando en la pierna izquierda" de Centurión, se indicó. Luego se comprobó que en su mano llevaba un teléfono celular.

De los 25 tomos que consta la causa, se pudo desprender la participación del policía bonaerense en "la malversación de caudales y la privación ilegítima de la libertad calificada de Lucas Escalante", se informó a la prensa.

Una vez realizada la detención, se efectuaron allanamientos en cuatro domicilios particulares vinculados al efectivo bonaerense y dos penales del Servicio Penitenciario Bonaerense donde se encuentran actualmente detenidos por esta investigación su hijo, Cristian Centurión, y su sobrino, Maximiliano Centurión.