Un segundo agresor fue identificado en el caso de Lautaro Alvaredo y la Justicia trata de obtener más información sobre un posible tercer involucrado en el feroz ataque a la salida del boliche Cyrux en Laferrere. 

Según explicaron este joven, identificado como Román Faray, habría golpeado a Lautaro en la nuca lo que provoco que cayera al piso y allí recibió la patada en la cabeza por parte de Ian Agustín Noguera Galeano que le ocasionó muerte cerebral. 

Con el paso de las horas los investigadores quieren corroborar si por el golpe en la nuca Lautaro cayó al suelo inconsciente o fue la patada criminal lo que le ocasionó su estado de salud irreversible.

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Acerca del tercer agresor señalado, desde la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Temática Homicidios Dolosos del Departamento Judicial La Matanza explicaron que es quién le pega otra patada a la víctima, cuando está en cuclillas, antes de caer al suelo.

En tanto, continúan los allanamientos para encontrar a Galeano, que se escapó con su papá. 

La mamá del prófugo habló con un medio y explicó que le contó su hijo: “Dicen que mi hijo estaba con una patota. Yo hablé con él, su amigo y su amiga. Ellos eran solo tres y nos dijeron todo lo contrario”.

En la entrevista reconoció que su hijo le rompió los anteojos a un amigo de Lautaro dentro del boliche y ello le pidieron la plata para compensar el hecho: “En un momento se peleaba contra uno y a su amigo lo agarraron entre tres, pero no entiendo por qué dijeron que estaba con una patota. Esto fue una pelea y yo no justifico lo que pasó, lamento la pérdida porque mi hijo tiene la misma edad y yo pido que investiguen porque la cara de mi hijo está en todos lados, pero esto fue una desgracia”.