Brusco giro en la causa por la muerte de una joven que cayó por el hueco de un ascensor en Pinamar
Una testigo comprometió al dueño del departamento en el que se desarrollaba la reunión de la que participaba la chica.
La investigación por la muerte de una joven de 24 años que habría muerto tras caer por el hueco de un ascensor, hecho que en un primer momento fue relacionado con un accidente, dio un giro en las últimas horas cuando surgieron sospechas en torno al dueño del departamento en el que compartía una reunión.
El cuerpo de Alicia Paredes Sánchez fue hallado decapitado sobre uno de los ascensores de un edificio situado en Constitución 344, de la localidad balnearia bonaerense. Todo ocurrió cuando la chica se encontraba en una reunión familiar en un departamento situado en el décimo piso y se dispuso a bajar a planta baja a abrirle a un grupo de concurrentes.
El cadáver de la joven había quedado atrapado en el segundo piso y la primera hipótesis apuntó a un accidente, mientras que la decapitación se explicaría en que al caer, habría quedado atrapada la cabeza en la puerta del ascensor.
Según indicó la prensa local, una testigo apuntó que el dueño de casa y la joven salieron juntos a recibir a las personas que tocaron el timbre, y que el hombre volvió solo, sin la chica y sin los nuevos invitados.
También se supo que ante la insistencia de los recién llegados, el hombre volvió a salir para buscarlos. Una vez que el dueño del departamento les abrió a los invitados, éstos, como se trataba de un grupo numeroso, propusieron dividirse en dos ascensores. No obstante, el anfitrión propuso subir en un solo ascensor, al alegar que "no se la iba a bancar", descartando el elevador en el que posteriormente fue encontrado el cuerpo de la joven..