Arrestaron a un integrante de la mafia china por amenazas a comerciantes
El hombre exigía dinero a cambio de protección, y en caso contrario, atacaba supermercados.
Un hombre de 36 años fue detenido hoy, acusado de extorsionar a supermercadistas chinos en distintas localidades del conurbano bonaerense.
En el marco de un operativo denominado "Extorsión dragón", dirigido por el Ministerio de Seguridad de la Nación, la Policía Federal arrestó a un integrante de una organización criminal que amenazaba a comerciantes chinos, mediante disparos arma de fuego e incendios en sus locales.
El detenido, de nacionalidad argentina, quedó a disposición del magistrado interventor por el delito de "Asociación ilícita, extorsión, disparo de arma de fuego, lesiones graves y otros estragos".
Durante la requisa se secuestró la indumentaria que habría sido utilizada por el causante al momento de concretar sus ataques, como también notas escritas en lenguaje extranjero, un auto, dos celulares y demás documentación de interés para la causa.
La investigación había comenzado recientemente, a partir de denuncias efectuadas en la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N° 2 Descentralizada Departamental de Gregorio de
Laferrere, mediante las cuales distintos comerciantes de origen oriental manifestaban ser obligados a pagar cuantiosas sumas de dinero en moneda extranjera, que iban desde los 10 mil hasta los 30 mil dólares en las primeras advertencias.
La indagación estableció que el modus operandi consistía en dejar amenazas escritas en chino y, si transcurridos algunos días de la demanda los comerciantes no se comunicaban acordando el
pago, comenzaban a ser blanco de distintas agresiones, tales como el envió de matones para destruirles mercadería, prenderles fuego los ingresos de los locales o, inclusive, ser víctimas de disparos de arma de fuego.
El fiscal del caso dio inmediata intervención al personal de la DUOF Morón, con la finalidad de identificar a los responsables y concretar su detención.
Luego de analizar la evidencia, los movimientos de los atacantes y valiéndose del sistema de reconocimiento biométrico, los uniformados lograron establecer un patrón entre los distintos
episodios, identificando a uno de los agresores, a quien se pudo vincular con dos domicilios en la localidad bonaerense de Remedios de Escalada, en el partido de Lanús.