Dos parejas de turistas uruguayos llegaron a San Carlos de Bariloche desde San Martín de los Andes y se alojaron en el hotel Bustillo, ubicado en el complejo Villa Huinid, a 2,5 kilómetros del centro de la ciudad. Tras realizar el check-in, Gerardo Casella y su esposa, Alba González, fueron a la habitación 107. Su cuñado, Víctor González, y su esposa, Ana María Marturet, lo hicieron en la 105. Ambas situadas en el primer piso del hotel y con vista a la montaña. Un par de horas más tarde, mientras descansaban en sus respectivas habitaciones, un alud de barro y piedras arrasó con una parte del complejo en el que estaban hospedados. Tres de ellos murieron. Solo se salvó Ana María.

El hecho sucedió el lunes por la tarde y este miércoles se confirmaron las muertes y se difundieron las fotos de cómo quedó la habitación 107

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Alud en Bariloche: así quedó la habitación donde encontraron muertos a los turistas
Se estima que entre las dos habitaciones había más de 130 toneladas de barro

Las autoridades habían manifestado horas antes que daban por sentado que el matrimonio se encontraba en el cuarto ya que no contestaban los celulares y habían realizado el check in minutos antes del alud.

“Teníamos un espacio reducido por lo que hicimos la tarea con pasamano, sacando el material hacia el exterior. Para esto fue fundamental el aporte de la Escuela Militar de Montaña que dispuso de mucha gente”, resaltó el rescatista de bomberos Melipal a un medio local.

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En todo momento se informó que ambas habitaciones estaban cubiertas de barro hasta el techo por lo que se estima que había unas 130 toneladas de lodo entre las dos. En el operativo de rescate trabajaron 20 personas de la Escuela Militar de Montaña, 20 bomberos del cuartel Melipal y 9 del Equipo de Búsqueda y Rescate de Estructuras Colapsadas de Patagonia (USAR) que se dividieron en dos turnos.

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Se utilizaron baldes para retirar el barro que llegaba hasta el techo

La otra persona fallecida es Víctor González Giovanelli, hermano de Alba. El hombre también fue con su pareja quién sobrevivió al alud y tuvo que ser asistida con un respirador mientras gran parte de su cuerpo seguía sepultado bajo el barro. El grupo familiar había organizado este viaje desde hace varios años luego de que uno de ellos haya ganado la lotería en su ciudad natal en Uruguay.

“La estructura del hotel está bien, no hay peligro, no hubo peligro tampoco para los rescatistas, se trabajó con un margen de seguridad importante”. Indicó Patricia Díaz de Protección Civil.