Este viernes falleció el gran arquitecto argentino Rodolfo Livigston a los 91 años de edad, en Mar de las Pampas, donde se encontraba veraneando junto a su familia.

"Murió mi papá", publicó este viernes por la mañana vía Facebook su hija Ana. Ya al mediodía, su esposa, Nidia Marinaro de Livingston, publicó en su cuenta de Instagram una foto de Rodolfo junto a su hijo menor, Tomás, junto al texto: "Queridos, murió Rodolfo en mis brazos, con Tomás al lado. En paz. Su alma sabia hizo única la despedida".

Livingston fue uno de los arquitectos que hizo escuela en Latinoamérica y el mundo durante la segunda mitad del siglo XX. Creador del “método arquitectura de familia” -lo opuesto a arquitectura de edificios- caracterizado por prestar atención y escuchar a las familias, y escuchar lo que el cliente quiere. Hizo más 4000 casas y el edificio del Instituto de Astronomía y Física del Espacio de Ciudad Universitaria

El denominado “Método Livingston” terminó formando cientos de profesionales en el mundo, dejando sólidas agrupaciones de Arquitectos de Familia en distintos países como Francia, España, Uruguay y Cuba, entre otros.

Livingston fue también autor de más de una docena de libros con casi 40 ediciones. Nacido y criado en Recoleta, hijo de un prestigioso odontólogo, Rodolfo no se sentía cómodo con la propuesta que la academia tenía de la arquitectura, por lo que a fines de la década de los 50, recién recibido, viajó al Chaco, donde cofundó la Universidad del Nordeste.

LEE: "Hacete de abajo nene...En la década del 60 cambió la forma de construcción de barrios populares en Cuba, dejando un legado en la ciudad de Baracoa con una barrio de 124 viviendas y centros comunitarios. Logró convencer a los habitantes de Baracoa de construir con techos piramidales, y gracias a eso las viviendas resistieron decenas de huracanes.

Con el retorno de la democracia en 1983, Livingston metodizó su visión como arquitecto de familia y comenzó con un estudio de arquitectura que ya tiene 40 años.

Rodolfo dejó como legado miles de casas e historias que crecieron en esas casas, cientos de arquitectos de familia que se formaron con su método de trabajo, y una arquitectura mucho más cerca de las personas.