El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, acompañó hoy a su vicejefe, Diego Santilli, en su primer acto de campaña en territorio bonaerense, en el marco de una actividad que organizó el intendente de Lanús, Néstor Grindetti, con la idea de incorporar en Juntos por el Cambio a referentes peronistas de toda la provincia que no comulgan con el Frente de Todos. 

El acto, que se llevó a cabo en el polideportivo “Héroes de Malvinas”, del sindicato de comercio Lanús-Avellaneda, marcó el punto de partida del plan de Rodríguez Larreta para poner pie en la provincia y apuntalar un armado bonaerense propio que tendrá como punta de lanza la candidatura de Santilli.

Durante el evento estuvieron presentes más de 40 dirigentes peronistas de los 19 distritos de la Tercera Sección Electoral, y que integran la agrupación "Hacemos" liderada por el jefe de gabinete lanusense, Diego Kravetz.

Si bien estuvo ligado al PRO desde sus orígenes, Rodríguez Larreta no es totalmente ajeno a la tradición peronista, con la que coqueteó en su juventud, y siempre abrigó la idea de ampliar el volumen de la coalición Juntos por el Cambio (antes Cambiemos) con sectores provenientes del justicialismo, para disputar poder en la provincia de Buenos Aires. 

Ese posicionamiento le valió no pocos roces con otros dirigentes de peso de su propio partido, mucho más refractarios al peronismo, y a los valores y legado que este movimiento representó para el país "en los últimos 70 años" de historia.

"Es fundamental que podamos ampliar el espacio y sumar a muchos dirigentes que compartan nuestra mirada. Tenemos que consolidar un proyecto superador que nos permita llegar a más vecinos con nuestras ideas", expresó Grindetti.

El jefe comunal consideró que "esta elección es sustancial para la vida de nuestro país" y agregó que el objetivo debe ser "lograr más representantes en las cámaras legislativas para frenar la avanzada del kirchnerismo sobre las instituciones".

La discusión sobre la ampliación de Juntos por el Cambio incluyendo a sectores disidentes del peronismo volvió a instalarse en el seno del PRO y hay diferencias sustanciales entre el sector moderado que lideran Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal y el bando de macrismo duro que encabeza la presidenta partidaria, Patricia Bullrich, quien sostiene un sesgo marcadamente antiperonista.

El propio Santilli confesó tiempo atrás que tiene "ADN" justicialista, y Rodríguez Larreta siente que esa condición filoperonista le permitirá a su alfil caminar la tercera sección electoral con mayor facilidad que otros candidatos de Juntos por el Cambio.

"Tenemos que volver a tener una provincia pujante y compañera. Los que estamos acá creemos en un proyecto colectivo. Estamos en otra etapa donde los peronistas tenemos que construir de nuevo la provincia de Buenos Aires. Una provincia con laburo genuino, donde los nenes vayan a la escuela", resaltó Santilli, quien de esa forma reafirmó su identidad peronista, pese a integrar el PRO.

"Tenemos vocación de ser gobierno, este no es un proyecto testimonial. Nosotros garantizamos la amplitud y la participación. No hay proyecto nacional si no va de la mano totalmente alineado con la provincia de Buenos Aires", concluyó el precandidato.

La presencia de Grindetti junto a Rodríguez Larreta y su pupilo no hace más que ratificar que el Grupo Dorrego de intendentes le soltó la mano al jefe comunal de Vicente López, Jorge Macri, quien resiste la candidatura de Santilli y amenaza con darle disputa en las PASO.