La Cámara Federal de Casación ratificó el rechazo a la exención de prisión del estadounidense Sean Lawrence Sullivan, sospechado de haber lavado dinero de Daniel Muñoz, el difunto ex secretario presidencial de Néstor Kirchner.

Sullivan está prófugo de la Justicia argentina desde hace cuatro años, pese a que en reiteradas oportunidades pidió garantías de no quedar detenido a cambio de presentarse ante los tribunales locales.

Los jueces Guillermo Yacobucci, Daniel Petrone y Mariano Borinsky ratificaron la decisión adoptada primero por el juez Claudio Bonadio y, tras su deceso, por su sucesor, Julián Ercolini.

El tribunal evaluó "las singularidades de la maniobra investigada, la cual se describe como una compleja organización que se habría dedicado a disimular el origen de fondos provenientes de la corrupción, valiéndose para ello de una amplia cantidad de personas físicas y jurídicas que operaban localmente y en países extranjeros".

"Esta estructura, en la que habría tomado parte Sullivan, es la que determina que se sigan realizando enormes esfuerzos para poder recuperar activos ocultos en el extranjero y dar con el paradero de otros individuos prófugos, entre los que se halla el imputado”, citaron los camaristas.

En torno a Sullivan y en relación con la causa los tribunales argentinos cursaron "solicitudes de asistencia internacional que fueron enviadas a las Islas Turks and Caicos, a la Región Administrativa Especial de Hong Kong, a los Estados Unidos, a los Emiratos Árabes Unidos, a la República Oriental del Uruguay, a la República de Panamá, al Principado de Andorra, a la Confederación Suiza, a los Estados Unidos Mexicanos, a Santa Lucía, Nueva Zelanda, las Islas Vírgenes Británicas y a San Cristóbal y Nieves".

"Sullivan sería además el destinatario final de algunos de los bienes sospechados, por lo que su posición es decisiva para el recupero de activos presuntamente de origen delictivo”, añade la resolución.

El tribunal relativizó la voluntad manifestada por los abogados de Sullivan para ponerse "a derecho".

"Si bien los apelantes destacaron la voluntad de Sullivan de someterse al proceso que se le sigue, señalando -entre otras cuestiones- que ha contratado abogados, presentado un descargo, ofrecido caucionar el levantamiento de su detención y aportado domicilio, lo cierto es que a más de cuatro años de librada su orden de captura nacional e internacional, a la fecha la misma no ha podido concretarse y el nombrado no se ha constituido de manera voluntaria a estar a derecho", resumió el fallo.