Rechazan un planteo del fiscal Scapolán, procesado por sustraer drogas de los operativos en que intervenía
Había pedido la nulidad por la supuesta falsedad del relato de un "arrepentido". Se lo acusa de ser el líder de una asociación ilícita.
La Cámara Federal de Casación penal confirmó el rechazo a un planteo de nulidad del fiscal de San Isidro Claudio Scapolán contra el inicio de la causa en la que fue procesado por presuntamente encubrir a una red de traficantes y quedarse con drogas de los operativos en los que intervenía.
La jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado procesó a Scapolán como jefe de una organización criminal que, entre otros delitos, habría robado cargamentos de cocaína a bandas de narcotraficantes.
Además, le trabó un embargo de dos mil millones de pesos ($ 2.000 millones) y no ordenó su detención pues está protegido por sus fueros.
Scapolán y otros imputados plantearon la nulidad de la causa sobre la base de la supuesta falsedad de la declaración de un arrepentido que precipitó la investigación.
Se trata de Carlos Daniel Maidana, cuyo relato permitió avanzar en la pesquisa pero, según Scapolán, se trató de una versión “guionada y falaz, con el objeto de mejorar su situación procesal”.
Los jueces Mariano Borinsky, Javier Carbajo y Angela Ledesma consideraron que “resulta inadmisible el análisis en esta instancia ya que son cuestiones que pueden ser reeditadas en el más amplio marco del debate”.
De esa manera, ratificaron que Scapolán deberá defenderse en la instancia del juicio oral, donde podrá plantear nuevamente la nulidad de la declaración del arrepentido.
“La decisión atacada ha sido dictada por la Cámara de Apelaciones en su carácter de órgano revisor de las resoluciones emanadas de los magistrados, es decir que en el caso existe doble conformidad judicial”, sostuvieron los jueces.
“No se ha acreditado en la especie, la existencia de una cuestión federal que permita habilitar la competencia de esta Casación como tribunal intermedio conforme la doctrina sentada por la Corte Suprema”, resumieron.
Scapolán sostiene que la acusación en su contra “se fundó en hechos falsos, direccionados para satisfacer intereses personales, comprometiendo, en lo sustancial, la garantía del debido proceso y defensa en juicio de los imputados”.