El secretario adjunto de Camioneros, Pablo Moyano, evalúa una propuesta que le acercó la cúpula de la CGT para integrar una de las sillas de la próxima conducción colegiada de la central que representará a las diferentes líneas internas.

Sin embargo, en su entorno aún ponen en duda que finalmente regrese a la organización para convivir con los sectores "dialoguistas".

El tema se trató en un encuentro reservado que se llevó a cabo en la sede de UPCN, donde se hacen las reuniones de "mesa chica" de la conducción.

Ahí, los referentes de los gremios de los "gordos", "independientes" y del transporte recibieron a un grupo de dirigentes cercanos a los Moyano para tender puentes y empezar a diseñar el esquema de la próxima conducción.

Sucede que la CGT cuenta con una conducción con mandato extendido por la pandemia y el 31 de agosto las organizaciones gremiales volverán a quedar habilitadas para hacer sus elecciones de autoridades, tras la prohibición que regía debido al coronavirus.

La idea de la conducción cegetista es consagrar en octubre próximo una nueva cúpula colegiada de entre dos y cuatro integrantes que puedan representar a la mayoría de los sectores, y de esa forma concretar el regreso de los grupos de gremios que se habían alejado debido a las diferencias políticas que existen entre ellos.

Entre esas facciones que podrían regresar a la central están los moyanistas del Fresimona, los del SEMUN que lidera el ferroviario Sergio Sasia, los del MASA que encabeza el taxista Omar Viviani y los de las 62 Organizaciones Peronistas, que tienen como sindicato troncal al de los peones rurales de la UATRE.

"Escuchamos los que nos dijeron (Héctor) Daer y Gerardo Martínez, entre otros muchachos que hablaron. Hablaron de la unidad, de tratar de ser coherentes, no se habló tanto de candidaturas. Ellos hablaron de fortalecer una CGT única", comentó a NA uno de los dirigentes que participó de la reunión en representación del Fresimona (Frente Sindical por el Movimiento Nacional).

Este sindicalista señaló que en el encuentro se dijo que "lo ideal es que haya un único secretario general y no una conducción colegiada", aunque esto se percibe poco probable por la falta de un dirigente que pueda representar a todos los sectores.

"En un momento de la reunión Juan Carlos Schmid (ex miembro del triunvirato de la CGT) pidió que lo que se acuerde para la conducción después se respete", en referencia a las quejas que esgrimió el titular de Dragado y Balizamiento cuando dejó su lugar en la conducción tripartita, al señalar que debía pedir permiso para todo al resto de los secretarios generales de la conducción colegiada.

Consultado sobre si finalmente Pablo Moyano tiene decidido volver a la cúpula cegetista, el dirigente señaló: "No me atrevería a jugármela. Dependerá de como sigan las negociaciones. Además creo que va a esperar hasta último momento para contar la cantidad de congresales que tendría a su favor".

Pese a que el hijo de Moyano viene ampliando su base de apoyo dentro de la CGT, lo cierto es que no cuenta con los congresales necesarios como para desplazar a los "gordos" e "independientes" y consagrarse como único secretario general de la entidad.