Con los cortes y las movilizaciones en el foco del debate del arco político, organizaciones sociales y partidos de izquierda volvieron a manifestarse en el centro porteño en reclamo por la libertad para dos dirigentes sociales detenidos en la provincia de Jujuy.

Las columnas militantes concentraron en el Obelisco a las 10 y movilizaron hacia Santa Fe y 9 de Julio, Casa de la provincia de Jujuy para exigir la libertad de los dirigentes Sebastián Copello (Partido Obrero) y Juan Chorolque (MTR 12 Abril) apresados por la policía jujeña acusados de “entorpecimiento de transportes y servicios” y “desobediencia a la autoridad”, quienes se manifestaban contra el pedido de arresto de otra dirigente social llamada Verónica Urzagasti.

Para el Polo Obrero, el responsable de las detenciones es el gobernador Gerardo Morales por haber "abolido las garantías constitucionales mínimas" en la provincia y señalan que el accionar "va acompañado del amedrentamiento, hostigamiento y anteriores detenciones con violación de los derechos humanos" que lo que buscan es "aleccionar a los movimientos de lucha".

En plena movilización, el legislador Gabriel Solano confirmó que, de no garantizarse la libertad de los dos dirigentes detenidos,  dirigentes políticos, sociales y de derechos humanos viajarán el lunes a Jujuy a pedir una entrevista con las autoridades provinciales. 

"La acusación de la detención es insólita, es por haber participado de una marcha en la provincia de Jujuy", afirmó el legislador en diálogo con NA, y anticipó: "Después de la marcha de hoy que hicimos en todas las provincias, el día lunes, vamos a concurrir con una delegación de dirigentes de Derechos Humanos, políticos y sociales para pedir una entrevista inmediata con las autoridades de la provincia. Si Juan y Sebastián no son liberados en las próximas horas, el lunes viajaremos a Jujuy y continuaremos este plan de movilización general".

Distintos referentes políticos cuestionan las marchas como estrategia de reclamo en el marco de la tensa negociación que protagonizan los movimientos sociales y el Gobierno por el aumento de planes sociales que al momento se mantiene en stand by. 

El reclamo del Polo Obrero y distintos sectores de la izquierda se da en el marco del proyecto presentado por los legisladores de la Ciudad que propone la quita de planes sociales a los manifestantes que corten las calles y "cometan delitos o contravenciones durante protestas". Encabezados por Waldo Wolff, el texto de la oposición va en línea con lo que pidió el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien exigió castigar a los piqueteros con la quita del beneficio estatal no solo por la interrupción del tránsito sino también por la utilización de menores en la protesta.

Si bien el Gobierno descartó la propuesta de Juntos por el Cambio, aclaró que "ocupar las calles" no es la solución a los "reclamos legítimos".

A su parte, y en una nueva contienda interna, Máximo Kirchner se opuso a la postura esbozada por la portavoz presidencial. “Hay que dejar de quejarse si cortan una calle y terminar con las pendejadas de la televisión”, disparó el diputado.