Lousteau, la "evolución" radical que se quiere quedar con el bastión del PRO
Autodefinido como "socialdemócrata moderno", el ex ministro de Economía y embajador en Estado Unidos quiere llevar a la UCR a una victoria en las elecciones con voto concurrente de la Ciudad.
El senador nacional de la UCR y líder del espacio "Evolución", Martín Lousteau, siente que es su momento para dar el salto en la Ciudad de Buenos Aires y quedarse
con el histórico bastión del PRO donde comenzó la historia ascendente del partido liderado por Mauricio Macri.
El precandidato a jefe de Gobierno de Juntos por el Cambio no la tiene sencilla: deberá imponerse en el duelo mano a mano con Jorge Macri, quien acaso detenta el caballo del comisario en este western político por la sucesión del sillón de Horacio Rodríguez Larreta.
Las encuestas muestran paridad con el primo del ex presidente en la interna, y además descansa en la benevolencia del actual jefe de Gobierno, quien pese a ser un hombre del PRO está ensayando un juego a dos puntas, casi de ecuanimidad entre ambos contendientes.
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Si llega a ganarle a Jorge Macri, tendrá el camino allanado a Uspallata 3160, la sede del Gobierno porteño, y podrá hacer así realidad su ambición de encarnar la renovación en el liderazgo de la UCR, un partido que suele ser juzgado por el anquilosamiento y falta de actualización.
A los 52 años, Lousteau busca representar esa búsqueda de frescura y oxigenación en el partido centenario, que desde por lo menos el 2015 (sino antes) perdió a manos del macrismo el espacio de principal fuerza de antagonismo al PJ. No pocos analistas le atribuyen a la UCR el lugar de "furgón de cola" del PRO, que sigue
siendo indudablemente la principal locomotora de oposición al peronismo kirchnerista.
El senador, que no es radical de cuna sino que se afilió recién en 2017 para reimpulsar su zigzagueante carrera política y darle un marco de pertenencia, busca devolverle a la UCR el sitio histórico que -según considera- nunca debió haber perdido. Sin embargo, maneja el timing político y sabe que no llegó todavía el momento de dar la pelea por la Casa Rosada.
Autodefinido como "socialdemócrata moderno", Lousteau barajó meses atrás la posibilidad de ser precandidato presidencial, pero al final no eligió el camino más corto, y prefirió concentrar sus energías en ganar la Ciudad, manifestando su apoyo a Rodríguez Larreta para la primera magistratura.
Ya había quedado en la orilla de ser jefe de Gobierno en 2015, cuando paradójicamente perdió muy ajustadamente en el balotaje contra el dirigente que hoy busca suceder en la Ciudad, y a quien le brinda su acompañamiento en la interna que sostiene contra Patricia Bullrich.
Para el jefe de Evolución, la lucha por la presidencia es un partido de largo aliento, y primero hay que acumular fuerzas en distritos clave (como la Ciudad) para recién en ese momento de consolidación disputarle abiertamente al PRO el liderazgo nacional de Juntos por el Cambio.
El recorrido político de Lousteau
El primer cargo de relevancia que desempeñó en la función pública fue como ministro de Producción del gobierno bonaerense de Felipe Solá durante algunos meses del año 2005, pasando a presidir en Banco de la Provincia a fines de ese año hasta fines del 2007.
Su perfil llamó la atención de Cristina Fernández de Kirchner, que lo convocó para ser su ministro de Economía en su primera presidencia.
Su paso por el Gabinete fue efímero y traumático, ya que renunció en medio de la polémica por su programa de retenciones móviles a las exportaciones de granos, iniciativa que desató la primera gran crisis del gobierno kirchnerista en su pelea con la Mesa de Enlace de las patronales agropecuarias.
Luego de varios años de volver al llano, Lousteau retomó su carrera política al participar de experiencia electoral del Frente Amplio UNEN, con la que consiguió una banca de diputado nacional.
Dos años más tarde, se convirtió en líder del frente electoral ECO y compitió como jefe de Gobierno porteño con la intención de destronar al PRO. Quedó demasiado cerca del objetivo: perdió por escasos puntos en el balotaje contra Rodríguez Larreta.
De la oposición al macrismo saltó luego a las filas de Cambiemos cuando en 2015 el recién asumido presidente Mauricio Macri lo designó embajador de Estados Unidos.
En 2017, volvió a tomar distancia del macrismo al competir y ser elegido como diputado nacional por el frente Evolución. En 2019 volvió a incorporarse a Juntos por el Cambio y fue elegido senador nacional por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Valiéndose de esa representatividad creciente, Lousteau logró escalar en la dirección de la UCR, siendo desde fines de 2021 vicepresidente del Comité Nacional, en una alianza con el titular del partido, Gerardo Morales.
En el plano personal, está casado desde el 2011 con la actriz Carla Peterson, con quien comparte un hijo, Gaspar Lousteau. Su padre Guillermo Lousteau Heguy, es un catedrático en Derecho que fue secretario de Turismo entre 1981 y 1982 durante la última dictadura militar.
El actual senador y ex ministro de Economía se formó en el Colegio Nacional de Buenos Aires y luego en la Universidad de San Andrés. Para pagar la cuota de sus estudios, se ganaba la vida como profesor de tenis. Años después se especializó con una maestría en el London School of Economics and Political Science.