El gobernador de Chubut, Ignacio Torres, y el intendente de Mar del Plata, Guillermo Montenegro, ambos del PRO, asistieron a una reunión clave en Casa Rosada, donde presentaron su disconformidad sobre las “desregulaciones” de la actividad pesquera contempladas en Ley Ómnibus. 

Ante el ministro del Interior, Guillermo Francos, ambos referentes opositores intentaron saldar el conflicto generado por las modificaciones en la Ley Federal de Pesca que intenta aplicar el Gobierno. 

En la previa al encuentro, Torres reveló que mantuvo comunicación con varios funcionarios que expresaron la voluntad de cooperar ante las críticas y su visita apunta a “desmitificar un montón de cuestiones”. 

“No hay país en el mundo que ceda su soberanía en las 200 millas, eso lo primero que queremos sacar, también que se revea la obligatoriedad de que las descargas sean en puertos argentinos, no solo por la trazabilidad y el control sino por la generación de empleo. Mar del Plata, Chubut, Santa Cruz, Río Negro, la pesca genera laburo y el sector genera divisas para la Argentina”, cuestionó el mandatario provincial.

Asimismo, y luego de que el Gobierno se mostrara abierto a negociar algunos puntos de la ley, Torres pidió la conformación de una mesa sectorial para avanzar en las negociaciones. “Nos queremos ir de esta reunión con la garantía que estos puntos que son sensibles se van a rever”, anticipó el gobernador de 35 años. 

A su parte, Montenegro precisó que espera que a Javier Milei “le vaya bien”, pero reiteró el pedido de diálogo para avanzar. 

“Nosotros queremos que le vaya bien, en nuestros cuatro años el kirchnerismo dejó todo destrozado, para reordenarlo hay que hacerlo con diálogo, que no afecte a las provincias y las ciudades que tienen a la pesca como principal generadores de riquezas”, sostuvo.

“Esperamos que haya un diálogo y sentido común. Afecta, hay que ver cómo se puede solucionar. No estamos buscando que al gobierno le vaya mal, pero hay que corregir mucho”, concluyó.