A las 9 de la mañana del domingo, el banquero Juan Nápoli, ex candidato a senador por La Libertad Avanza (LLA), tuiteó que sortearía un auto si Javier Milei se imponía en el balotaje y él llegaba a 25.000 seguidores en su cuenta.   

La propuesta de Nápoli describe de cuerpo entero la columna vertebral de LLA: un movimiento con pocos vínculos con el establishment político y que se compone de cuadros técnicos de alto nivel, pocos dirigentes con trayectoria , figuras como la diputada electa Lilia Lemoine y en el que se permiten acciones como las de Nápoli.

Así comenzó para LLA la histórica jornada electoral que erigió a Milei como nuevo presidente de la Argentina derrotando al Partido Justicialista (PJ), encolumnado detrás de la figura del ministro de Economía, Sergio Massa, tras un acuerdo tripartito que incluyó la decisión de la fórmula presidencial saliente, Alberto Fernández-Cristina Kirchner. 

El economista inició su día casi como cualquier otro. Milei es despojado de lujos hasta, incluso, poco disfruta de los placeres -efímeros- de la comida. El viernes pasado fue al mítico teatro Colón -símbolo de la Generación del '80- junto a su novia, la humorista Fátima Flórez. Fue abucheado y respondió con ironía en su cuenta de X. 

El diputado optó por hacer del Libertador su punto de encuentro con su equipo de campaña y que, por estos días, desfilaron sus flamantes legisladores, Patricia Bullrich y hasta el ex presidente Mauricio Macri. Está hospedado allí desde el fin de semana previa a las primarias del 22 de octubre en el piso 21. 

Cerca del mediodía, acompañado de su hermana y jefe de campaña, Karina Milei, el líder de LLA se subió a un auto y partió hacia la sede de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) para emitir su sufragio. 

"Estamos muy tranquilos, hemos hecho todo el esfuerzo que podíamos hacer. Ahora que hablen las urnas", indicó en declaraciones a la prensa Milei. Por esa horas las urnas ya hablaban. De hecho, la Cámara Nacional Electoral (CNE) había comunicado que ya había votado el 30% del padrón nacional. 

Al igual que en las elecciones generales, el legislador y experto en crecimiento económico -con o sin dinero, como se encarga de remarcar- fue respaldado por cientos de personas en el centro educativo ubicado en el barrio porteño de Almagro.

Tras votar, el ex arquero de Chacarita regresó a su habitación del hotel. Allí lo esperaban dos figuras que adquirieron un rol preponderante en los últimos meses: Santiago Caputo y Nicolás Posse, que suena para ser su jefe de Gabinete.

Entre ese círculo, y otras caras poco conocidas para los argentinos, Milei pasó su tarde hasta la llegada de los cuadros con mayor visibilidad que tiene La Libertad Avanza y que se fueron plegando a la epopeya presidencial del ex empleado de la Corporación América. 

Desde las 17 horas, los libertarios comenzaron a copar la esquina del Libertador, ubicado en la Avenida Córdoba y Maipú, con banderas y símbolos representativos de "El León", el apodo que adquirió Milei en el inicio de su carrera política e inspirado en la canción "Panic Show", del grupo de rock nacional La Renga.  

El cierre de comicios a las 18 horas precipitó un fuerte aluvión de libertarios a los alrededores del búnker. Cerca de las 19 horas, Guillermo Francos, asesor y eventual ministro del Interior, pronunció un breve y moderado discurso. En él, diluyó los cuestionamientos previos alimentados en LLA de fraude y dijo que Milei estaba "muy bien".

El semblante en los pasillos ya era bueno. Sobre todo por los rumores negativos que comenzaban a llegar al búnker de Unión por la Patria. El clima de algarabía se respiraba en el aire y las bandejas del catering corrían con mayor rapidez por la llegada de más invitados. En el medio, Victoria Villarruel ingresó al lobby del hotel y provocó una revolución. 

Sin embargo, nadie se animaba a decir en voz alta los datos que llegaban del escrutinio provisorio. La ruptura de esta cadena llegó por el lado menos pensado. A las 19.35, través de X, el presidente del Bloque PRO en Diputados, Cristian Ritondo, rompió el silencio e hizo público lo que era una secreto a voces: "Felicidades Javier Milei y Victoria Villarruel".

La salutación de Ritondo, acompañada por una foto en la que sostiene una motosierra, emulando a Milei, hizo soltar la carcajada de los dirigentes e invitados de LLA que fueron copando el salón del primer piso del Libertador y las decenas de periodistas presentes. 

A las 19.45, los parlantes del lugar soltaron las primeras melodías musicales y ya se rumoreaba que en algunos minutos hablaría Massa para reconocer la derrota. Así fue. Gritos y llantos de festejo hicieron eco en el lugar cuando el titular del Palacio de Hacienda dijo que ya se había comunicado con Milei para felicitarlo por la victoria. 

También llegó la confirmación de que Bullrich y Macri se acercarían al lugar para felicitar a la fórmula Milei-Villarruel, que desde el 10 de diciembre tendrán nueva oficina: la Casa Rosada, en Balcarce 50. 

Norberto Milei y Alicia Lucich, los padres de Milei, fueron los invitados que nadie esperaba cruzarse al menos en la zona de acceso a los invitados. El semblante de ambos era de emoción, pero evitaron dar declaraciones a la prensa. 

Cerca de las 22 horas, Karina Milei se subió al escenario montado en un salón colmado de cámaras de televisión nacionales e internacionales. Fue la primera vez que la jefa de campaña pronunciaba palabras en público. Más peculiaridades de LLA. 

"El León" se subió al escenario y sus invitados rugieron. Mientras los presentes posaban sus celulares frente al atril en el que se apoyaba Milei, varios dirigentes nacionales del PRO se asomaron para intentar escuchar y ver el discurso del libertario. Entre ellos, NA pudo ver al diputado Diego Santill y una fila de bullrichistas.

Las palabras de Milei no difirieron a las que venía pronunciando, pero sí hizo énfasis en los compromisos económicos que tiene la Argentina en el corto plazo, en un claro gesto hacia el mercado, que lo miró de reojo durante todo el proceso electoral.

Al finalizar, Milei y Villarruel, escoltados por la novia del economista y su hermana, se subieron al palco montado en la calle y le hablaron a los cientos de militantes que acompañaron a la fórmula vencedora. En las próximas horas, el libertario se reunirá con el presidente Fernández a solo 14 días hábiles para su asunción.