La Provincia advirtió por la escasez de plasma y realizó un "llamado enorme a la solidaridad"
Por semana, hay un promedio de 137 pacientes que requieren ese tratamiento, pero hay 53 donantes. Aquellas personas que hayan tenido COVID y donen tienen una licencia especial de dos días.
El Gobierno bonaerense advirtió este martes la escasez plasma disponible para el tratamiento de casos graves de coronavirus y realizó "un llamado enorme a la solidaridad" para convocar a donantes.
Actualmente, según advirtió el Ministerio de Salud provincial, en el distrito hay un promedio semanal de 137 pacientes que requieren el tratamiento de plasma frente a la media de 53 donantes en el mismo período.
"Tenemos una demanda creciente de plasma y tenemos pocos donantes", alertó el titular de la cartera sanitaria, Daniel Gollan.
Y agregó: "Queremos aumentar mucho más este recurso, que, como se ha demostrado en estudios científicos, salva vidas".
Durante el reporte de la situación epidemiológica frente a la segunda ola de casos de coronavirus, el funcionario provincial remarcó que ante esta situación el Gobierno bonaerense está "haciendo un llamado enorme a la solidaridad para que aquellos que tuvieron la enfermedad donen nuevamente".
El plasma es el suero o porción líquida que queda después de que se hayan removido los glóbulos rojos, las plaquetas y otros componentes celulares de la sangre.
Cuando una persona tiene una infección, su organismo reacciona creando anticuerpos para defenderse: una vez que la persona se recupera, esos anticuerpos quedan almacenados en el plasma durante semanas o incluso años.
La terapia de transfusión de plasma convaleciente se basa en que el enfermo reciba los anticuerpos que ya vencieron al virus en otra persona.
Por cada donante se realizan hasta cuatro transfusiones a personas infectadas con coronavirus.
Pueden donar plasma las personas confirmadas de COVID-19, una vez transcurridos 28 días de su recuperación: deben tener entre 18 y 65 años, pesar más de 50 kilos, gozar de buena salud y no poseer enfermedades preexistentes como hepatitis, alguna neoplasia, o enfermedades cardiovasculares.
En agosto de 2020, el Congreso de la Nación aprobó la Ley 27.554 para crear una "Campaña Nacional para la Donación de Plasma Sanguíneo de Pacientes Recuperados de COVID-19".
La norma apunta a fomentar la donación de plasma de parte de aquellas personas que se hayan recuperado tras haber contraído coronavirus.
Con ese fin, estableció una licencia especial de dos días para los pacientes recuperados donantes de plasma sanguíneo que trabajen bajo relación de dependencia, en el ámbito público o privado.
"Los trabajadores deben acreditar la donación de plasma con la presentación del certificado otorgado por el centro de salud interviniente. Esta licencia no podrá afectar el salario en ninguna forma, ni implicar descuentos, ni la pérdida del presentismo, ni la perdida de cualquier otro beneficio laboral o adicional salarial que perciba el trabajador", establece la legislación vigente.