El Gobierno de la Ciudad definió este lunes reforzar los controles en el transporte público para garantizar que este sea utilizado exclusivamente por trabajadores esenciales y que se cumplan los protocolos para viajar.

En concreto, el gobierno de Rodríguez Larreta dispuso que más de 300 agentes y concientizadores trabajen con el objetivo de garantizar que "el transporte público sea de uso exclusivo para trabajadores esenciales y el cumplimiento de los protocolos".

La decisión fue tomada por la Secretaría de Transporte y Obras públicas, que además dispuso que se refuercen los controles en estaciones de Subte y Centros de Trasbordo. 

"Más de 250 agentes de Tránsito y 60 concientizadores estuvieron esta mañana controlando que los pasajeros cuenten con el permiso correspondiente, pero además, corroborando el correcto uso de tapabocas, promoviendo el distanciamiento y ordenando las filas en los espacios de espera", indicaron desde la Ciudad.

"El personal a cargo del operativo constatan también que las ventanillas se encuentren abiertas en todas las unidades y controlan los aforos", remarcaron.

Los operativos se encuentran en los Centros de Trasbordo de la ciudad (Retiro, Constitución, Chacarita, Once, Liniers, Flores, Sáenz y Pacífico) ya que es donde se concentra la mayor cantidad de pasajeros.

Los agentes realizan un intenso trabajo de concientización  y acompañan en todo momento el armado de las filas para que el momento de espera al aire libre sea con el distanciamiento correspondiente y el uso de tapabocas.