Hidrovía: el gobierno no hará obras en los puertos ribereños pero cambiará la ley de cabotaje para favorecerlos
El titular de la Agencia Nacional Portuaria, Iñaki Arreseygor, realizó los anticipos ante autoridades portuarias en la ciudad de Rosario y aseguró que la nueva licitación no incluirá el dragado desde Timbúes hacia el norte de la autopista fluvial.
Luego de recorrer la Terminal Puerto Rosario y de sostener reuniones en la Bolsa de Comercio rosarina, la visita de Iñaki Arreseygor dejó algunas frases importantes que anticipan las próximas medidas de la administración de Javier Milei para la Hidrovía y su ecosistema productivo.
El más polémico será el relacionado a los cambios en la ley de marina mercante.
No es un dato menor porque hay mucha puja y advertencias desde sectores nacionalistas que apoyaron a la fórmula presidencial de La Libertad Avanza, y suelen señalar que se trata de una medida que atenta contra los intereses nacionales y, hasta, de defensa del territorio.
Pero, por ejemplo, desde la gobernación rosarina de Maximiliano Pullaro y otros funcionarios provinciales de estados con intereses en la hidrovía, venían solicitando las modificaciones para que se cambie la normativa y se permita a embarcaciones de bandera extranjera hacer cargas y descargas en distintos puertos nacionales.
Junto a ese anuncio, los empresarios y trabajadores portuarios tomaron nota de la frase de Arreseygor, cuando señaló:
“…el gobierno viene a desregular la actividad y lo va a hacer, pero obras no van a haber”.
Las obras serán de los privados y la desregulación llegará vía decreto, como suele suceder en esta gestión nacional.
Un dragado más profundo al norte del puerto de Timbúes, un departamento de la localidad de San Lorenzo a 135 km de la ciudad de Santa Fe, fue descartado por el funcionario al argumentar que el tránsito río arriba al gran Rosario es estrictamente barcacero y no amerita el gasto de tener una vía navegable apta para grandes barcos.
Desde luego, que los cambios en la ley de marina mercante, que son y serán resistidos por sectores de la logística y de la industria, que suelen expresar que los paraguayos tienen menores costos impositivos y laborales para emprender, se producirán antes que tarde y podrían ser parte de una nueva tanda de decretos del Poder Ejecutivo durante este mes.
El instrumento por el cual se realicen los cambios podría traer repercusiones entre la Casa Rosada y la Casa Gris, sede de gobierno de Santa Fe.
Mientras que el team Milei promoverá un decreto, el equipo de Pullaro prefiere que se sancione una nueva ley de cabotaje nacional para una actividad que tiene a pocos empresarios y trabajadores argentinos ocupados en la actualidad.
En declaraciones a Rosario3.com, el ministro de Desarrollo provincial, Gustavo Puccini, expresaba que "..es clave trabajar en la apertura del sector para que puedan operar embarcaciones nacionales y extranjeras bajo ciertas condiciones, maximizando el tráfico comercial proveniente de Brasil, Paraguay y Bolivia", lo que permitirá una mayor actividad en los puertos de la capital provincial y en Rosario.