Ante la victoria de Juntos a nivel nacional, el líder de la coalición Mauricio Macri señaló en declaraciones televisivas que el país está ante “el fin de una era oscura y perversa”. “Estamos frente a un Gobierno que no tiene plan ni rumbo y que ha destruido la confianza con los argentinos y con el mundo”, afirmó. 

En la misma línea, destacó que Juntos se encuentra “parados de otra manera”, y señaló que "esta nueva oportunidad no puede ser desaprovechada”. “No podemos repetir los mismos errores del pasado de pasar del derrotismo al exitismo. Se val kirchnerismo y ahora queremos un nuevo salvador, cuando los salvadores iluminados no existen”, manifestó, y agregó: "Necesitamos un conjunto de dirigentes maduros, responsables, que entiendan la complejidad de lo que significa construir la sociedad que queremos, que no caigan en la simplificación y que estén a la altura de la madurez que demostraron la Argentina en esta elección".

Macri señaló que el Gobierno no logró dar vuelta la elección en la provincia de Buenos Aires a pesar de "haber puesto toda la plata que puso", y sostuvo que se trató de una derrota del "kirchnerismo en su conjunto, y su pérdida de contacto con la realidad".

"La gente ha dicho basta, y esta madurez de los argentinos debe estar acompañada por la madurez de los dirigentes de Juntos por el Cambio, que comprendan que otra de las cosas que la gente castigó fue la pelea interna del Frente de Todos", afirmó, y sumó: "Debemos dar un ejemplo de verdad, y señalar que el compromiso que tenemos es el de cambiar la historia, y enamorarnos de las ideas que saquen al país adelante". 

Por último, descartó la posibilidad de entablar un diálogo con el Gobierno. "Debemos tener mucho cuidado. ¿Quién llama al diálogo?...¿el presidente solo?, ¿el presidente con la vice?, ¿con Massa?, ¿con La Cámpora? Debemos ver quiénes son y qué van a hacer. ¿Van a traer un plan en seri, para negociar con el mundo? ¿Van de dejar de decir que el fondo tiene la culpa de todo?", concluyó.